Patrimonio religioso, un «acicate» más para atraer más viajeros a Castilla y León

«Somos ricos en patrimonio cultural y religioso, y entre todos debemos ser inteligentes para aprovechar estos recursos y conseguir atraer a más viajeros y turistas».

Son palabras del consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, este jueves en Villanueva del Campo, localidad zamorana a la que se acercaba para visitar y conocer su iglesia de Santo Tomás, que ha sido declarada hoy por el Consejo de Gobierno como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de monumento.

Ortega destacaba la importancia del rico y variado patrimonio religioso del que dispone la Comunidad que llamaba a potenciar desde el punto de vista turístico. «Además, del uso religioso a este tipo de inmuebles hay que darles la utilización cultural para, en primer lugar, cuidarlo, y, después, protegerlo, mostrarlo y difundirlo para que sea un acicate más en la llegada de nuevos visitantes que quieran conocer Castilla y León», apuntaba el consejero, mientras defendía la apuesta de la Junta por recuperar edificios religiosos y civiles además de conjuntos históricos para darles una nueva vida que ayude también a dinamizar la actividad económica y cultural de los lugares donde se encuentran y contribuir a la repoblación rural.

La declaración de Bien de Interés Cultural de la iglesia de Santo Tomás se delimita un entorno de protección, atendiendo a su ubicación exenta y elevada en el centro del casco urbano de Villanueva del Campo, que incluye el conjunto de espacios públicos y parcelas con frente al edificio.

La iglesia de Santo Tomás es una construcción gótica de una sola nave, crucero y cabecera poligonal y sorprende por sus enormes proporciones y variedad de estilos al haber sido objeto de numerosas intervenciones a lo largo de su historia, que han dejado una indiscutible huella en sus fábricas. Lo más notable del conjunto es su torre, que responde a una construcción del siglo XVI, aunque tiene clara influencia de las típicas torres mudéjares propias del siglo XIII o XIV.

Posee planta cuadrada y cinco cuerpos en altura, los dos primeros de sillares de piedra y los tres siguientes de ladrillo. La construcción, además, presenta gran solidez que se ve reforzada por pilastras en sus cuatro esquinas, tanto en las fábricas de piedra como en las superiores de ladrillo. Se incluyen en la declaración el conjunto de bienes que, como bienes muebles o partes integrantes, se relacionan en el expediente, como el magnífico retablo mayor, obra de 1542.

En su estancia en la iglesia de Santo Tomás de Villanueva del Campo, Javier Ortega mostraba su satisfacción porque se haya dado resolución a un expediente de Bien de Interés Cultural incoado en el año 1983, y finalizaba la visita animando a usar estos bienes «entre todos» para dar un nuevo impulso al turismo regional.

Además, avanzaba quela Consejería seguirá trabajando en la puesta en valor del patrimonio y resolviendo los expedientes de protección que, como este de Villanueva, carecen de documentación suficiente según los requerimientos técnicos y legales que en la actualidad se exigen, con el fin de cumplir el programa previsto, completar esa documentación y realizar los trámites exigidos por la normativa vigente que incrementan la seguridad jurídica y la participación social.