Mañueco pide que las medidas que pongan en marcha de forma “urgente” porque las familias y las empresas que “no pueden aguantar”

“Las medidas aprobadas en esta Conferencia de Presidentes se deben de poner en marcha de manera urgente porque hay familias y empresas que no pueden aguantar más”. Así lo aseguró el presidente de la Junta de Castilla y León en funciones, Alfonso Fernández Mañueco, tras la Conferencia de Presidentes, celebrada en La Palma, y de la que añadió que “esperábamos más, pero lo importante es quedarnos con la idea de la declaración conjunta que representa la posición unánime del Gobierno y las Comunidades Autónomas, nos quedamos con lo positivo, aunque nos hubiera gustado ser más ambiciosos”.

Y es que el jefe del Ejecutivo castellanos y leonés consideró “insuficientes” las rebajas de impuestos aplicadas por el Gobierno a la energía, si bien aceptó que sea una cuestión que dependa de la negociación con Europa de la regulación del mercado. No obstante, reiteró que se “haga cuanto antes”, porque aseguró que es un problema que se arrastra desde antes de la guerra, ya que a su juicio ahora la agricultura y la ganadería, la industria o las familias están pagando las consecuencias del cierre “precipitado” de las minas y las térmicas.

Por este motivo, reiteró en su demanda a la Administración central de que impulse una bajada “inmediata” de los impuestos, para abaratar el coste de la energía, con la aplicación de un IVA “superreducido”, así como un plan de choque con ayudas y rebajas fiscales para empresas y sectores productivos afectados por las consecuencias de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Fernández Mañueco hizo hincapié en que la situación económica del país, agravada por el conflicto bélico, requiere de “medidas a corto plazo”, que se deben tomar de manera “urgente”, con rebajas fiscales y planes de ayudas, porque insistió en que las familias y empresas, vinculadas con el campo, la industria o los sectores electrointenvisos lo están pasando “mal”, tanto por los costes energéticos, como por la escasez y encarecimiento de las materias primas.

Al respecto, el presidente de Castilla y León en funciones defendió que estas políticas, que corresponden al Gobierno, son “perfectamente compatible” con el proceso de negociación en Europa sobre la regulación del sistema eléctrico, puesto que España pide desacoplar el precio del gas del megavatio hora en el mercado mayorista, con el fin de frenar la escalada de la factura de la luz.

Respecto al impulso a la ejecución de los fondos europeos, el jefe del Ejecutivo autonómico explicó que los presidentes diferían en el diagnóstico y en las conclusiones, pero remarcó que llegaron a un acuerdo que recoge la necesidad de que en su gestión se tenga en cuenta a los sectores productivos afectados y a las propias administraciones, como las Comunidades Autónomas, para que sean “más eficaces”.

También, reconoció que la reforma del modelo de financiación autonómica es un clásico en estas reuniones. “No hay conferencia en la que varios presidentes no saquen el asunto”, dijo. Por ello, insistió en que es necesario que se aborde el problema, que precisó no está en cómo repartir el mismo volumen de dinero de una manera distinta, porque a su juicio esto enfrenta a unas comunidades con otras, sino en el aumento de los recursos que permitan atender la gestión de los recursos públicos.

“Al lado del Gobierno con los refugiados”

“Estamos al lado del Gobierno de España y al lado de la Unión Europea en el tema de Ucrania”, afirmó Fernández Mañueco, quien destacó el paquete de ayudas elaborado por la Junta y pidió un “esfuerzo extraordinario” para que el desembolso de las comunidades se sufrague con un fondo extraordinario que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene que negociar en Europa.

Por tanto, reiteró que el Gobierno de España tiene el apoyo de las comunidades para la negociación de los fondos que se necesitan para afrontar la integración de los refugiados y también, solicitó, una posición “firme” y “enérgica” en Europa.

El presidente de la Junta en funciones expresó a la nación ucraniana la “solidaridad” y “compromiso” con la situación que viven por una guerra “absurda” y “estúpida”, que insistió es “injusta” e “injustificable”. Por ello, trasladó el compromiso de “apoyo y respaldo” al Gobierno en todas las decisiones que tengan que plantear en el marco de la Unión Europea y sobre la ayuda humanitaria y la acogida de refugiados.

Finalmente, Fernández Mañueco se despidió de La Palma expresando su “afecto y solidaridad”, así como el de Castilla y León, a toda la población que sufrió la erupción del volcán de Cumbre Vieja.