Mañueco avanza que las listas de espera para ser operado desciende un 6% en Castilla y León con el Plan de Choque

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, aseguró, en Burgos, que el gran reto en Sanidad es reducir las listas de espera para atajar el impacto de la pandemia del COVID.

Por ello, está en marcha un Plan de Choque, que con las medidas implantadas desde marzo, la lista de espera ha descendido ya un 6 por ciento en Castilla y León y se está a la espera aún del efecto de las últimas iniciativas para ampliar la actividad de quirófanos por las tardes.

Fernández Mañueco subrayó que un segundo reto, común al Sistema Nacional de Salud, es atraer a más profesionales, tanto en el área médica como en la de enfermería. En este sentido, ha garantizado que desde la Junta se va a hacer todo lo posible para ello, siempre reivindicando la necesaria implicación del Gobierno de España.

Y un tercer reto es seguir introduciendo mejoras avaladas por la evidencia científica: avanzar en telemedicina, telepresencia y seguir mejorando el funcionamiento en red.

Así lo indicó durante su intervención en el acto del X Aniversario del Hospital de Burgos. Y es que diez años han pasado ya desde que abriera por vez primera sus puertas el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) bajo una fórmula concesional que sigue siendo criticada por la oposición socialista principalmente, pero que este lunes ha defendido una vez el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, como ya hiciera su antecesor Juan Vicente Herrera, impulsor de este centro sanitario, cuando presidía en la Comunidad y tuvo que soportar incluso una Comisión de Investigación en las Cortes por la gestión y sobrecoste que tuvo este Hospital.

“Este centro pudo ser realidad en una época de gravísima dificultad para las inversiones públicas, gracias a la fórmula concesional”, decía Mañueco, mientras defendía que fue un proyecto de gran envergaduray muy complejo, pero que ha supuesto todo un acierto para la ciudad. “Diez años después, se puede confirmar que este moderno hospital ha supuesto un paso de gigante para la sanidad de Burgos porque ha aupado la atención hospitalaria al siglo XXI”, afirmaba el presidente.

Un tiempo, en el que se han atendido en este hospital a 7,5 millones de pacientes, y se han llevado a cabo más de 170.000 operaciones además de cinco millones de consultas externas.

Mañueco destacaba también que el Hospital de Burgos es fruto del “autonomismo útil” y del modelo autonómico que impera en España. “Sin una autonomía hubiera sido más lento, más costoso y probablemente más tardío que el haber podido construir estas instalaciones como las que hoy disfrutamos en el ámbito sanitario”, aseguraba el jefe del Ejecutivo autonómico, en declaraciones recogidas por Ical durante el acto que se ha celebrado este lunes en el hospital con motivo de su décimo aniversario.

Tras agradecer y reconocer el esfuerzo y protagonismo que tuvo Juan Vicente Herrera en la puesta en marcha del HUBI, Mañueco se comprometía a seguir dotando a este hospital de la última y más moderna tecnología, como es el caso del PET-TAC, el equipo de diagnóstico más avanzado en el Sistema Nacional de Salud que está instalado en el HUBU, además del robot Da Vinci o los mamógrafos de última generación con los que cuenta el Hospital.

También se comprometía el presidente a avanzar en el trabajo en red con el resto de recursos sanitarios como el Hospital de Aranda de Duero, “cuyo nuevo centro ya tiene licencia de obras”, decía, o con el hospital de Miranda de Ebro, “en el que se acaba de impulsar una nueva sala de rayos X”.

“El Hospital de Burgos es una puerta abierta al futuro y a la esperanza en la sanidad de Burgos, Castilla y León y de España”, destacaba el presidente, mientras agradecía también el trabajo y buen hacer de las 3.500 personas que forman parte del equipo de profesionales del centro hospitalario burgalés -911 más que en el anterior, el General Yagüe a su cierre-.