La contratación “a dedo” de la ex senadora Teresa López en la Diputación de Valladolid abre otra herida en el PSOE

La contratación “a dedo” como asesora jurídica en la Diputación de Valladolid de Teresa López, ex senadora socialista y ex alcaldesa de Medina del Campo, cuando dejó su escaño en la Cámara Alta al perder el PSOE un senador por designación autonómica en las pasadas elecciones autonómicas de febrero, y se quedó sin cargo ni ocupación alguna, ha abierto una nueva herida en las filas socialistas, donde han arreciado las críticas internas al proceso que se ha seguido en este asunto por parte del Grupo Provincial del PSOE.

Un proceso que, de momento, ha desembocado en la dimisión presentada por el diputado provincial del PSOE en Valladolid Javier González Trapote, que ha acusado al Grupo Provincial de diseñar un proceso de selección fraudulenta, ya que, según apuntaba, en el PSOE siempre supieron que el puesto iba a ser para ella, por Teresa López.

Sin embargo, desde la Dirección Provincial se defiende dicho proceso como regular mientras que el secretario provincial del PSOE y alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha defendido el procedimiento que se ha seguido y atacaba al dimisionario con cierta sorna. “Siempre se van los mejores”, decía con ironía.

El líder de los socialistas de Valladolid aseguraba que el Grupo Provincial “podía contratar a quien quisiera por ser un cargo de libre designación” y explicaba que por ello se abrió un procedimiento para que se presentaran los militantes socialistas que estuvieran interesados -se presentaron cuatro- y cumplieran tres requisitos básicos: tener conocimientos de derecho, del ámbito municipal y un determinado tiempo de militancia.

“De los cuatro candidatos, Teresa López fue la que más puntuación tuvo”, defendía Puente.