Dueñas llama a consumir lechazo de Castilla y León por su calidad frente a otros

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, ha visitado este lunes en la localidad zamorana de Coreses la cooperativa agroganadera Asovino, donde ha destacado que la cadena alimentaria cada vez se está cumpliendo mejor a la hora de compensar las pérdidas que había acumulado el sector durante los últimos ejercicios.

El consejero ha hecho un pequeño balance de este 2022 que se acaba, del que ha dicho que está siendo un año “muy complejo” para el sector porque a la situación complicada que se arrastraba por la covid-19 se ha sumado la invasión de Ucrania por parte de Rusia que ha “distorsionado el comercio internacional” y la crisis energética.

Además, se mostraba optimista de cara al inicio del año que viene en el que se espera una “ralentización de los costes energéticos”, lo que, según decía, repercutirá de forma positiva en el sector productor.

Aún así, advertía de que no será hasta el segundo semestre del próximo año cuando comience a relanzarse el sector agroganadero.

Sobre las ayudas a agricultores y ganaderos afectados por los incendios forestales del pasado verano de la provincia de Zamora, Dueñas ha puesto de relieve que su departamento autonómico ha destinado más de 1,5 millones de euros el pasado verano a la alimentación de las ganaderías afectadas y además se han habilitado ayudas directas por valor de un millón de euros.

A esas ayudas, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural sumará otras acciones como el apoyo individualizado en determinados proyectos, la reposición de caminos rurales afectados o el impulso de concentraciones parcelarias.

Calidad del lechazo

Respecto a la visita que hacía a las instalaciones de Asovino, en Coreses, el consejero ponía en valor la calidad del lechazo de Castilla y León, tanto el de la Indicación Geográfica Protegida como el de Tierra de Sabor frente a los procedentes de países como Francia, Italia y Grecia, sobre todo en una época en el que se convierte en uno de los productos más demandados.

“Que los consumidores sepan que los lechazos que etiquetamos con nuestras vitolas, esas cuatro vitolas en los cuatro cuartos, bien sea la vitola negra con el corazón amarillo de Tierra de Sabor o bien sea la vitola de color rojo con la contraetiqueta de la IGP, son el marchamo de calidad de nuestros productos de la tierra alimentados del leche y con piensos de la propia Comunidad autónoma”, apuntaba, en declaraciones recogidas por Ical.

En este sentido, Dueñas añadía que este es el valor que tiene que tener nuestro consumidor para diferenciarlos de esos corderos lechales que vienen fundamentalmente de Francia, de Italia y de Grecia, que tienen otros requerimientos diferentes, más laxos y que, por tanto, la calidad no es la misma que la que aporta nuestro lechazo.

El consejero explicaba que los servicios veterinarios de Salud Pública son los encargados de hacer los controles y que el etiquetado que llega al consumidor sea un claro, donde aparezca el origen del producto, la fecha de sacrificio y todos los datos que van a suponer esa trazabilidad para que el consumidor sepa si realmente esta viniendo de Francia o de Italia o si es realmente de esta Comunidad.

Queso castellano

El consejero recordaba que el próximo mes de enero, la Administración autonómica “relanzará” la IGP del Queso Castellano como un complemento a la Denominación de Origen Queso Zamorano. “Se trata de intentar ser capaces de que la leche siga teniendo un incremento de precio como ha ocurrido en Castilla-La Mancha con el queso manchego y, por tanto, ser impulsando esa actividad importante para nuestros productores en una situación compleja en la que están”, indicó.

“Es un año en el que intentaremos relanzar los diferentes usos de la lana como otra actividad complementaria a la leche y a la carne dentro de este sector tan complejo”, apuntó.

Por otra parte, Gerardo Dueñas hacía hincapié en que, por primera vez desde hace varios años, hay más incorporaciones en el sector ganadero que en el sector agrícola, lo. “Esto nos da una idea de que sí que hay relevo generacional para la ganadería, destacaba, mientras avanzaba que este año se cerrará con unas 683 incorporaciones en total, que es algo más de un diez por ciento que el año pasado.