Alimentación

UPA-COAG promocionará la patata con un concurso que pondrá en valor sus condiciones culinarias

Los alumnos de cocina del IES Diego de Praves de Valladolid utilizarán “este producto de primera” calidad en el certamen que tiene como modalidades freír, cocer, puré y guisar

La Alianza UPA-COAG presenta la 1ª Edición del Premio de Castilla y León a las "Patatas de Oro"
La Alianza UPA-COAG presenta la 1ª Edición del Premio de Castilla y León a las "Patatas de Oro"Eduardo MargaretoAgencia ICAL

La Alianza UPA-COAG promocionará el cultivo de la patata a través de la primera edición del Premio de Castilla y León a las “Patatas de Oro”, un certamen que pondrá en valor sus condiciones culinarias. “Se trata de un producto de calidad de primer orden en Castilla y León”, destacó el secretario general de UPA, Aurelio González, quien señaló que la recepción de muestras por parte de agricultores, almacenistas y distribuidores, entre otros, está abierta hasta el 26 de enero. Las bases se encuentran colgadas en la web de la formación.

González incidió en que este “impulso” al producto confiere, además, un valor añadido a la patata premiada. El acto consistirá en la cocina y degustación de platos, con la patata como único protagonista y a través de cuatro categorías: patata de cocer, guisar, para puré y freír, gracias a las aportaciones de la Interprofesional del Aceite de Orujo de Oliva y del de Oliva de España. Cada participante podrá presentar su producto para una o varias modalidades, en función de las condiciones que cada uno crea que tenga su patata.

Es requisito imprescindible que tenga su origen en Castilla y León y que se demuestre la trazabilidad. Así, una de las metas es poder identificar si una patata agria de Burgos, de Valladolid o de Palencia es mejor para guisar o para freír, por ejemplo.

El concurso se desarrollará en las cocinas del IES Diego de Praves de Valladolid, donde los alumnos que en el futuro serán cocineros “conozcan ya de primera mano las condiciones organolépticas de cada producto”. Contarán con un jurado de personalidades reconocidas del sector agrario y culinario. Se celebrarán además dos jornadas informativas previas en el instituto para que los alumnos sepan las características.

“Estamos convencidos de que es una buena iniciativa para promocionar la excelencia de la patata de la Comunidad, una base importante de la alimentación”, comentó González, quien expuso que la intención es que se celebre anualmente en Valladolid, provincia principal productora de patata de España. También existe la posibilidad de extender el concurso a nivel nacional y se pretende que la Interprofesional de la patata “intente desarrollar” estas ideas en sus campañas para para el futuro de los agricultores.

En la misma línea, el coordinador autonómico de COAG, Lorenzo Rivera, habló de buscar que los circuitos de comercialización “sean mayores para una mejor calidad del producto”. También confió en que estos Premios se conviertan en una “referencia” para dar a conocer los distintos tipos de patata, variedades y tipos de producción en la Comunidad, “con sus características culinarias, sola y como acompañante en la cocina”.

Margen para crecer

En la actualidad, Castilla y León cuenta con 17.000 hectáreas de cultivo y 800.000 toneladas de producción, el 40 por ciento de la producción nacional. De ellas, 112.000 se exportan, principalmente a Portugal. España, con 66.000 hectáreas, produce más de dos millones de toneladas. Sin embargo, Rivera lamentó que estas cifras están lejos de las anotadas hace tres décadas, cuando era tres veces mayor. “Obedece al descenso del consumo, las importaciones, que han hecho mucho daño, los precios y los altos costes de producción con los regadíos, mientras en Europa prácticamente no utilizan riego”, explicó. En este sentido, consideró que el punto optimista es la posibilidad amplia de crecimiento para aumentar los dos millones de toneladas. A su juicio, hay espacio para sembrar patata y crecer. “Si importamos 817.000 toneladas y exportamos 280.000, es un saldo negativo de más de medio millón de toneladas que podríamos utilizar. En ese aspecto hay que invertir y obtener precios justos para conseguir una cadena de valor más equilibrada”, insistió Rivera.

Igualmente, recordó que la patata admite “múltiples de texturas, formas, etc.”, y lo comparó con otros productos. “En vinos, la gente habla de crianzas, jóvenes, roble… pero de la patata hay un desconocimiento total. Por eso, la trazabilidad y etiquetado para conseguir una marca de calidad en Castilla y León es fundamental. Se hacen premios con el vino, pero también el queso o el porcino, y es significativo que no hay de la patata”, dijo.

También profundizó en el escalonamiento de las siembras como objetivo principal para que “haya patatas en distintas épocas del año y no solo en agosto y septiembre, cuando se producen los arranques”. Sobre el cambio climático, “aparte del daño que está haciendo, en este caso puede jugar a favor el hecho de tener 40 días más de calor, pero con costes altos”.

Por último, consideró que estos Premios pueden contribuir a que los restauradores y periodistas especializados del sector “puedan conocer y ensalzar el producto”, además de “llegar al público en general y que sea un cultivo rentable para los agricultores”.

Por su parte, Elena Fernández y Enrique Ortega, del IES Diego de Praves, destacaron una iniciativa que “pone en valor un producto ligado al terreno, a Castilla y León”. “Queremos que nuestros alumnos, que serán futuros profesionales, conozcan el producto para poder cocinarlo perfectamente”, expuso Fernández, quien subrayó que con este certamen “se pone en valor el producto, no la receta, como en otras ocasiones”.

Por su parte, Ortega señaló que el jurado “no tendrá un plato delante, sino un producto real, en las cuatro categorías”, sobre las detalló que serán de cocción para un estofado, un puré de patatas, patata hecha al horno lavada con su piel, y frita con aceite de orujo y oliva. Después, una cata a ciegas dictaminará qué patata será la ganadora y poder “afianzar y dirigir la mirada a la zona de procedencia e incluso cuál dará mayor beneficio al cultivador y a los consumidores”.

En defensa del agricultor

Por último, tomó la palabra el patatero Alberto Duque, anterior presidente de COAG en Valladolid, quien pidió que “no se demonice” a los agricultores si la patata es una de las causantes del encarecimiento de la cesta de la compra. “La producción baja y con todo, la gente cree que tiene un precio muy caro. Su precio este año es porque ha habido una producción muy inferior a la habitual y unos costes desorbitados, con gasóleo, luz o abonos cuyos gastos se han multiplicado. Nosotros somos un eslabón y no el conjunto de ella, pero la patata que se consume hoy no tiene porque ser más cara que en abril”, argumentó Duque.

Es más, consideró que “si hay alguien que gana, no es el agricultor, porque el producto ya está en manos de la distribución y los almacenistas”. Por último, lamentó que ha bajado el consumo en fresco en España, con 24 kilos por habitantes y persona, cuando Alemania y Bélgica están en 40. “Animo a que los premios continúen durante más años”, concluyó para impulsar la producción, informa Ical.