Salud
El Clínico de Valladolid evaluará la eficacia de la trombólisis intravenosa tras un ictus
Los accidentes cerebrovasculares representan tras el infarto de miocardio la segunda causa de mortalidad, así como la demencia, y la primera de invalidez permanente
El Hospital Clínico Universitario de Valladolid evaluará la seguridad y eficacia de la trombólisis intravenosa en pacientes con accidente cerebrovascular o ictus isquémico que están en tratamiento con anticoagulantes orales directos.
El centro hospitalario participa en un ensayo clínico promovido por el grupo suizo Insel Gruppe, según informa el Registro Español de estudios clínicos (REec) de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps).
La investigación persigue ser una prueba definitiva de la hipótesis de que la estrategia de trombólisis intravenosa (con alteplasa o tenecteplasa) es superior al estándar de atención para lograr mejores resultados.
Los accidentes cerebrovasculares representan tras el infarto de miocardio la segunda causa de mortalidad, así como la demencia, y la primera de invalidez permanente. Un 80% de los casos el ictus se produce por la presencia de un tapón o coágulo (isquémico) frente a un 20% que se genera por la rotura de un vaso (hemorrágico).
En este sentido, por cada minuto que el cerebro está en una situación de falta de riego sanguíneo mueren dos millones de neuronas.
Por ello, es clave proporcionar de manera inmediata un fármaco que disuelva el coágulo salvando la porción del cerebro amenazado o bien hacerlo de manera mecánica (procedimiento intervencionista endovascular).
El objetivo principal es restaurar el flujo sanguíneo normal lo más rápido posible, minimizando el daño a los tejidos afectados. Una intervención temprana es fundamental para mejorar el pronóstico de unos pacientes que, en dos terceras partes de los casos, presentan secuelas.
En este estudio, que espera la participación de 200 pacientes (100 en España), también participarán los servicios de Neurología del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, La Fe de Valencia, el Trias i Pujol de Badalona, el Vall d’Hebron de Barcelona y el Ramón y Cajal de Madrid.