Sociedad

¿Cuál es la mejor ciudad de España para disfrutar del tardeo?

Es la que cuenta con el mayor número de bares por habitante

Tarde de vinos en el Barrio del Húmedo de León
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El tardeo está de moda. Con el final de las vacaciones los españoles nos resguardamos en nuestras casas y hacemos otro tipo de planes diferentes a la época estival. Una de las preferidas es el tardeo, que es la costumbre española de tomarse un aperitivo antes de ir a cenar para ir abriendo boca. La excusa que se esconde como trasfondo es juntarse en los bares con los amigos y disfrutar de una buena tapa. Pero no solo se trata de salir a tomar una caña y una tapa, el tardeo puede extenderse y aplicarse como concepto a salir de copas a las cinco y media de la tarde. Solo los más hábiles son capaces de combinar vermú largo mañanero con tardeo prematuro, lo que supone un nivel de profesionalidad no apto para noveles.

El principal y gran beneficio del tardeo es que la fiesta comienza antes y por lo tanto acaba antes, para los que ya van entrando en edad y ya no son tan nocturnos. Además, anima las calles de las ciudades, y para los dormilones, esta práctica no exime de echarte una buena siesta.

Muchas son las ciudades españolas, cada vez más, que ofrecen un plan ideal de tarde, pero hay una que sobresale por encima de todas ellas, por dos motivos fundamentales: una, que es la capital española con más bares por habitante; y otra, que la oferta de vinos y tapas que ofrece es una de las de más calidad de nuestro país. Esta ciudad no es otra que León, que cuenta con 5,03 bares por cada 1.000 habitantes, según los datos del informe de la Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHRDATA), y destacan los establecimientos ubicados en los barrios Húmedo y Romántico.

- El Barrio Húmedo es la esencia de la capital leonesa, así como la parte más transitada y conocida del Casco Antiguo. Se sitúa en el interior del cinturón que forman la Calle Ancha, la calle de la Rúa, la calle del Caño Badillo y la calle de las Cercas.

Probablemente los orígenes de esta zona se remontan a la antigua Roma. Aquí se situaban las barracas de la población civil que abastecía de productos al campamento romano durante el nacimiento de la ciudad. Esta zona monumental presenta un aspecto pintoresco, con estrechas calles que nos trasladan a la edad medieval y que alternan amplias plazas llenas de edificios históricos y casas que soportan bajo sus cimientos décadas de antigüedad. Los nombres de algunas de sus calles reflejan los oficios artesanales que se realizaban y que le dieron vida en el pasado, como la Calle Carnicerías, Calle Plata, Calle Platerías, Calle Azabachería o Calle Zapaterías.

La plaza más emblemática es la de San Martín, alrededor de la que se extiende todo el Barrio Húmedo y donde se pueden encontrar otras plazas importantes como la Plaza Mayor, la Plaza de Conde Luna o la del Grano. En la actualidad el Barrio Húmedo es famoso por albergar la mayor oferta hostelera y de ocio de la capital, con una de las áreas con más restaurantes por metro cuadrado de España. Se pueden encontrar una gran cantidad de mesones, restaurantes, tabernas y bares de tapeo donde degustar la gastronomía más representativa de la provincia. También es famoso por ser el protagonista de las noches leonesas gracias al elevado grupo de pubs y discotecas de las que dispone, donde transcurre la vida nocturna de la ciudad, sobre todos los fines de semana.

La Calle Ancha se podría definir como la línea que separa las dos partes de casco antiguo: el Barrio Húmedo y el Barrio Románico. Debido a su privilegiada situación, siguiendo el primitivo trazado romano de la Legio VII, es un punto clave del tránsito de turistas que visitan la zona antigua de la ciudad y sus monumentos.

 

Es una calle peatonal que transcurre desde la Plaza de San Marcelo hasta la plaza de la Catedral conocida como Plaza de la Regla. Es una vía bastante amplia y está flanqueada por centenarios edificios, en cuyas plantas bajas se desarrollan actividades comerciales variadas.

Durante los meses veraniegos o cuando el mal tiempo da una tregua en los meses más fríos, los bares despliegan sus terrazas al servicio del viandante, las cuales son un lugar bastante agradable para tomar un refrigerio y descansar los pies después de pasear por la ciudad.

La Calle Ancha también es escenario de los mayores acontecimientos del año. Durante la Semana Santa muchas de las procesiones la recorren, momento en el que la calle se hace casi intransitable debido a la gran aglomeración de espectadores que se concentran, ya que es uno de los mejores puntos de la ciudad para ver las procesiones.

-El Barrio Romántico: Barrio insigne de León, donde en su aura llena de romanticismo, convive la gran riquezapatrimonial y monumental como decorado, aderezada con una oferta gastronómica y hostelera con aire audaz y desenfadado, sin perder un toque de distinción y calidad. La calle Cervantes, Plaza Torres de Omaña, calle del Cid…. componen parte de ese entramado donde ver y dejarse ver.

Para impregnarse del color local, nada mejor que comenzar el paseo en la plaza de San Marcelo, uno de los puntos neurálgicos de la capital. Su imponente puesta en escena se debe a la Iglesia de San Marcelo , consagrada al centurión romano que fue martirizado por abrazar la fe cristiana, el Palacio de Torreblanca , asiento para una sociedad recreativa, y la Casa de la Poridad.

Testimonio del señorío medieval, el Palacio de los Guzmanes es una obra iniciada en 1559 que ha sufrido posteriormente di versas restauraciones y mejoras. Considerado el más importante monumento civil de la ciudad, entre otros detalles por su escalinata, acoge desde 1882 a la Diputación Provincial.

 

Frente por frente, la Casa de Botinesse configura como un espléndido poema visual debido al talento del catalán Antonio Gaudí. Fue construida en la última década del siglo XIX para el comerciante Juan Homs y Botinás, y de ahí la particular denominación de un edificio creado para dejar volar la imaginación. León luce su fisonomía más mundana en la Plaza de Santo Domingo, aureolada por una hilera de construcciones con enorme rango urbano. Una de ellas es Pallarés, antiguo almacén de ferretería y otros usos que ha sido reconvertido en Museo de León. La colección se compone de más de 2.500 piezas, entre las que destacan distintos testimonios de época romana y medieval.

La calle del Cid es el eje central del Barrio Romántico, una zona en la que predomina la alegría de vivir, muy presente en sus numerosos establecimientos de ocio. Nebulosas tradiciones orales aseguran que aquí mismo habitó el legendario Cid Campeador, todo un héroe del pasado. Salpicado de rincones igual que postales, una tranquila y apacible atmósfera impregna el coqueto jardín, convertido en escenario sentimental para promesas de fidelidad eterna y desencuentros amorosos.

Leyendas aparte, la belleza de las piedras de la Basílica de San Isidoro nos habla desde su silencio inmemorial. Se trata de la expresión más completa del arte románico en España, auténtico documento en piedra donde palpita la mágica historia de lo que fue el Reino de León. Su Panteón Real acoge los restos de distintos monarcas y otros personajes pertenecientes a la estirpe que creó un imperio.

Míticos bares de León

- Casa Benito (Plaza Mayor, 20. León): Lo que diferencia a Casa Benito de el resto e que es uno de esos históricos del Húmedo que hace décadas hacía las veces de lugar de reunión en torno a unos cuantos vinos.

- La Bicha: La Bicha (Plaza San Martín, 4. León): Se trata del templo de la morcilla, que con la compañía de una deliciosa copa de vino de El Bierzo, ofrece un "planazo" al completo.

- El Rincón del Gaucho (Calle Azabachería, 1. León): Es uno de los bares más míticos de León, de los que nadie puede saltarse. En sus años de historia se han hechas famosas sus tapas de picadillo aunque, si tienes la oportunidad, tira de carta y pide una de sus tradicionales sopas de ajo.

- El Flechazo (C/ Cardiles, 2. León): El Flechazo ha apostado por sus patatas picantes convirtiéndolas en un clásico de El Húmedo, una de esas paradas obligadas.

- El Llar (Plaza San Martín, 5. León): Una de esas tabernas de toda la vida que nunca pasa de moda. Sus patatas fritas con queso de Valedeón ya se han hecho famosas.