Sucesos

Descubren una vivienda ilegal en suelo rústico en el entorno del Camino de Santiago burgalés

Se hallaba soterrada en la ladera de un monte en la comarca Odra-Pisuerga

Un Guardia Civil junto a la vivienda detectada
Un Guardia Civil junto a la vivienda detectadaIcal

Efectivos del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos y agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León detectaron una vivienda ilegal edificada en suelo rústico en la comarca Odra-Pisuerga (Burgos), en un paraje que se encuentra enclavado en el entorno del Camino de Santiago, según informaron hoy fuentes del instituto armado.

La construcción alcanza los 100 metros cuadrados y se halla soterrada en la ladera de un monte en la comarca Odra-Pisuerga. Aunque en 2020 se solicitó licencia municipal de obras para una caseta de aperos, su concesión sigue aún en tramitación. La actuación conjunta llevada a cabo por efectivos de ambas instituciones, finalizó con la investigación del promotor de una construcción ilegal, cuyas iniciales son J.M.M.P., de 60 años de edad, como presunto autor de un delito de urbanismo quien, paralelamente, fue denunciado por infracciones a la Ley de Minas, a la Ley de Montes y a la Ley de Urbanismo.

Fachada de la vivienda detectada
Fachada de la vivienda detectadaIcal

Agentes del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta, observaban días atrás unas extensas obras en la ladera de un monte en la comarca Odra-Pisuerga, donde se levantaba una edificación a modo de vivienda que llamó su atención al erigirse en un solar no urbanizable. Las pesquisas realizadas demostraron que en noviembre de 2020 el promotor y a su vez propietario de la vivienda había solicitado en el ayuntamiento correspondiente una licencia municipal de obras para la construcción de una caseta de aperos sobre dicho suelo rústico.

Pero, según las citadas fuentes, las gestiones realizadas han arrojado que su concesión seguía en tramitación por omitir el interesado ciertos requisitos. Efectivos del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos y agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León se personaron en el paraje, donde se comprobó un gran movimiento de áridos en la parcela y una amplia construcción a modo de vivienda soterrada en la falda del monte.

Una inspección destapó la disposición interior como residencia, de aproximadamente 100 metros cuadrados de superficie, repartida en dos plantas, obra que superaba con creces el proyecto inicial. La superior habilitada para dos habitaciones, un baño y cocina con salón comedor; la planta baja repartida en tres estancias, a la que se accedía por una escalera.

Se verificó que el dueño no contaba con los permisos necesarios para llevar a cabo las obras señaladas, por lo que ha sido investigado como presunto autor de un delito de urbanismo, instruyéndose diligencias que han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 4 de Burgos.