González Palacín afronta su quinto mandato en la UCCL con un campo "más vivo que nunca"

El burgalés Jesús Manuel González Palacín, coordinador general de la Unión de Campesinos de Castilla y León (Uccl) estará otros cinco años más como mínimo al frente de este sindicato agrario, en el que será su quinto mandato.

La organización celebraba este viernes en la Feria de Valladolid su noveno congreso bajo el título "Labrando el futuro", donde Palacín era reelegido por unanimidad y pese a llevar más de veinte años dirigiendo el sindicato aseguraba estar más ilusionado si cabe que el primer día que llegó.

En este sentido, hacía referencia a las últimas movilizaciones del sector en las que ha visto al campo más vivo que nunca y con ganas de dar la batalla y defender su futuro.

Su nueva ejecutiva pasará de 17 a 23 integrantes, de los que el 50 por ciento serán menores de 45 años, lo que garantizará el relevo generacional del sindicato agrario, según destacaba Palacín, que estuvo arropado por el candidato del PP al Parlamento Europeo Raúl de la Hoz; así como por el presidente del CES de Castilla y León, Enrique Cabero, y el secretario regional de CCOO, Vicente Andrés.

Demandas a Europa

Y ante la nueva constitución del Parlamento Europeo tras los comicios del 9 de junio, el líder de Uccl apostaba por reducir los requisitos ambientales de la PAC y lograr que los productos que llegan de terceros países cumplan las mismas exigencias que los producidos en la UE. Asimismo, exigía herramientas en la ley de cadena alimentaria, con la publicación de los costes de producción, para que no se venda a pérdidas y que las explotaciones sean rentables.

"Tenemos una oportunidad histórica para cambiar las cosas, porque en estos momentos las administraciones son muy sensibles a nuestras propuestas”, afirmaba, mientras reconocía que las relaciones con el Gobierno " se han normalizado" y que han pasado de ser los "destructores del medio ambiente y unos delincuentes” a “productores de alimentos", con un papel fundamental en la sociedad.

Si bien, y a pesar de esta normalización, González Palacín advertía de que si sus objetivos no salen adelante, “volveremos a las calles".

Una reforma intermedia de la PAC que logre reducir las exigencias medio ambientales; que todo alimento que llegue desde terceros países a la UE, cumpla las mismas exigencias que se requieren a los productores europeos; y repensar iniciativas europeas como la regulación de restauración de la naturaleza, que quiere “eliminar la ganadería extensiva", decía, son las prioridades que se ha marcado para este nuevo mandato.

Finalmente, demandaba un compromiso firme con la ganadería de la UE, y herramientas para poder negociar precios de forma efectiva en la ley de cadena alimentaria que pasan, dijo, por la publicación de los costes de producción, para que ninguna operación se produzca por debajo de esas cifras.