Objetivo: ampliar el turismo rural a zonas sin oferta de alojamientos

Cientos de personas han visitado ya esta mañana en su primer día la Feria Internacional de Enoturismo FINE, que se celebra hasta mañana en la Feria de Valladolid, con la presencia de 125 bodegas y territorios nacionales e internacionales, además de la participación de 70 touroperadores y agencias de viajes especializadas en enoturismo, procedentes de hasta 22 países, frente a los 12 de la pasada edición.

Un evento marcado en rojo en el calendario de los profesionales del vino y su cultura llamado a contribuir al posicionamiento de la Península Ibérica como un destino enoturístico de referencia en los mercados exteriores

Un cónclave que, además, llega en momento inmejorable, ya que Castilla y León es líder en enoturismo en España con nueve Rutas del Vino de las 36 actuales certificadas por ACEVIN y con una décima que está en proceso de ser homologada. Rutas como son las del Arlanza, Arribes, Bierzo, Cigales, Ribera del Duero, Rueda, Sierra de Francia, Toro y Zamora, que ofrecen alternativas y propuestas turísticas en las que se incluyen desde museos hasta vinotecas, pasando por restaurantes, queserías, obradores, casas rurales o Posadas Reales, con las que la Comunidad "vertebra y dinamiza una gran parte del territorio, con el hilo conductor del vino y las bodegas visitables", según destacaba en la presentación el director general de Turismo, Angel González Pieras.

Además, anunciaba un línea de subvenciones, dotada con 500.000 euros, para impulsar el desarrollo de establecimientos hosteleros en lugares turísticos de la Comunidad que, actualmente, no cuentan con una oferta complementaria de alojamientos para acompañar al recurso turístico.

Objetivo: ampliar el alcance del turismo rural y no acotarlo solo a determinadas poblaciones con un límite de habitantes, además de primar la calidad y la singularidad.

"El turismo rural ha dejado de ser un complemento de la renta agraria para tener fuerza por sí mismo”, decía el director general, para quien el turismo de Castilla y León "se tiene que basar en cuestiones en las que somos singulares y competitivos dentro de un mercado muy concurrente a nivel internacional”.

Proyecto en La Raya

En este sentido, Pieras apuntaba al turismo de patrimonio y enogastronómico, por la fortaleza de la Comunidad en este sentido, y ponía en valor las Rutas del Vino: "Son el eje por el que se desarrolla una gran parte de nuestro turismo enogastronómico”, afirmaba, mientras avanzaba que en los próximos meses se unirá a las nueve rutas existentes una décima, relativa a la zona de Prieto Picudo, "una variedad, desconocida pero riquísima”.

Finalmente, señalaba que en los próximos días mantendrá una reunión con instituciones y operadores de la zona de La Raya, en la frontera entre Portugal y Castilla y León, para desarrollar un programa conjunto dentro del Interreg VA España-Portugal (POCTEP), financiado con fondos europeos, para lanzar un programa “muy concreto” de desarrollo del turismo enológico ligado al río Duero a ambos lados de la frontera.

Además de en el stand promocional, la Consejería articula la participación de las Rutas del Vino en FINE con nueve espacios individualizados en la zona expositiva, unificadas a través de una imagen identificativa global. Igualmente, cabe señalar que las Rutas del Vino participarán en el workshop B2B con reuniones programadas con turoperadores nacionales e internacionales de hasta 22 países, especializados en enoturismo.

Y en el stand de la Junta de Castilla y León, se realizarán catas y presentaciones de las nueve Rutas del Vino para dar a conocer el destino turístico a los turoperadores de FINE. Estas presentaciones se realizarán a última hora de la tarde de ambas jornadas.

Para el Gobierno que preside Fernández Mañueco, el turismo patrimonial y el enogastronómico son dos ejes prioritarios de su política turística. Respecto al enoturismo, el director general reafirmaba el apoyo decidido de la Junta a las Rutas del Vino de Castilla y León, promoviendo su certificación, implantación y desarrollo, así como respaldando acciones promocionales conjuntas y de posicionamiento de la marca turística "Rutas del Vino Castilla y León".

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, destacaba la importancia del enoturismo en la provincia al contar con “más de 300 bodegas, todas amparadas en marcas de calidad”, y aseguraba que supone una “clara apuesta” de la institución provincial por el enoturismo al ser el vino “marca de calidad de España y de Valladolid”.

Ana Redondo, concejal del Ayuntamiento de Valladolid, ponía en valor la importancia de la ciudad y la provincia en materia vitivinícola. "Valladolid se escribe con ‘v’ de vino", decía, mientras ponía en valor que FINE conjugue "integración e identidad”, con la cooperación del sector público y privado.

Asimismo, reafirmaba la apuesta del Ayuntamiento por un turismo enogastronómico de calidad y recordaba los planes de sostenibilidad que desarrolla con fondos Next Generation de la UE, que permitirán a la capital “ahondar en esa idea”.

El sector vitivinícola en la Comunidad emplea a 80.000 personas, representa el 3,1 por ciento del PIB y genera 1.800 millones de euros de valor añadido bruto, mientras que el turismo rural cuenta con 3.200 establecimientos y 26.000 plazas hoteleras