Sociedad
Salamanca rinde homenaje al descapotable de la elegancia, el poder y la innovación
Es la pieza del mes en el Museo de Historia de la Automoción de la ciudad que podrá visitarse gratis el próximo martes
El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca (MHAS) invita a salmantinos y turistas a disfrutar de la historia de uno de los vehículos norteamericanos más espectaculares y glamurosos.
La pieza del mes de mayo es un espectacular Cadillac 62 Convertible de 1950, exponente máximo del lujo y la distinción que caracterizaron a los grandes automóviles estadounidenses a mediados del siglo XX.
El martes 6 de mayo, al igua que cada primer martes del mes, la entrada por la tarde, de 17:00 a 20:00 horas, es gratuita.
Este modelo, símbolo de una época dorada para el diseño del automóvil, representa a la perfección el espíritu de innovación y elegancia que Cadillac ha encarnado durante más de cien años.
Con una producción limitada a 6.986 unidades en todo el mundo, el Cadillac 62 no solo fue una joya de la ingeniería, sino también una declaración estética inconfundible. Sus líneas, firmadas por el célebre Bill Mitchell, y su trasera inspirada en el bombardero F-18, marcaron un hito visual que anticipó las legendarias aletas de finales de los años 50.
El Cadillac 62 Convertible del MHAS, más que un ‘haiga’, como popularmente se conocían estos exuberantes modelos en España, es una pieza histórica que ilustra la potencia, el confort y la exclusividad del diseño automovilístico estadounidense.
A su imponente presencia, se suman unas prestaciones técnicas que, como demostraron las 24 Horas de Le Mans de 1950, donde Briggs Cunningham alineó dos Cadillac de 1950, uno transformado en barqueta y el otro, un 61 Coupé, cuyo V8 de 180 CV permitía rozar los 185 km/h.
Las condiciones ruteras de ambos eran más que adecuadas, lo que les permitió clasificarse en décimo y undécimo lugar, realizando una media de 132 km/h.
En 1950, la firma superó a Packard como líder del segmento, convirtiéndose en símbolo de estatus para jefes de Estado, estrellas de Hollywood y miembros de la llamada ‘café society internacional’.