
Economía
Un total de 28 trabajadores perdieron la vida en Castilla y León durante los primeros ocho meses de 2025, un 23% más que el año pasado
CCOO denuncia que el “aumento continuo” de la siniestralidad laboral es consecuencia del “grave incumplimiento de la normativa de prevención" por parte de "muchas empresas”

Un total de 28 personas trabajadoras perdieron la vida durante los primeros ochos meses de 2025 en Castilla y León, lo que supone un aumento del 23 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2024, según informaron fuentes de Comisiones Obreras (CCOO). En este sentido, denunciaron que este “aumento continuo” de la siniestralidad laboral es consecuencia del “grave incumplimiento de la normativa de prevención por parte de muchas empresas”, añadieron.
Más en concreto, el 58 por ciento de las muertes (16 personas) fue debido por accidentes no traumáticos como infartos o ictus, directamente relacionados con el “deterioro de las condiciones de trabajo”. Para el sindicato, estas muertes “no son inevitables ni fortuitas”, ya que son el resultado de una “organización laboral deficiente, de ritmos de trabajo excesivos, fatiga crónica, estrés, ansiedad y dificultades crecientes para conciliar la vida laboral y personal”.
Todo ello, según CCOO, “evidencia una exposición constante a riesgos psicosociales” que impactan de “forma directa sobre la salud mental y física” de las personas trabajadoras.
De igual forma, el otro 42 por ciento de los accidentes mortales (12 casos) tiene su origen en la “inexistencia o ineficacia” de las medidas de seguridad en los centros de trabajo. Se han registrado muertes por atrapamientos, aplastamientos, caídas de altura, sepultamientos, golpes por objetos y accidentes de tráfico laboral, detallaron.
Según Comisiones Obreras, “todos estos casos son evitables si se aplican correctamente las normas de seguridad y si se vigila su cumplimiento”. Estos fallecimientos revelan una siniestralidad que “está desatada por la desidia empresarial y por la falta de vigilancia por parte de las administraciones competentes”, aseguraron.
“La prevención de riesgos laborales no es un lujo, es un derecho que debe estar en el centro de actividad de todas las empresas, porque son las responsables de garantizar la seguridad y salud laboral de las personas trabajadoras en los centros de trabajo, y es una obligación inherente del empresariado para proteger la salud de su plantilla. Y cuando esto no se cumple, las consecuencias son trágicas", el secretario de Acción Sindical, Salud Laboral y Medio Ambiente de CCOO Castilla y León, Fernando Fraile.
Ante esta situación, el sindicato ha puesto en marcha la campaña de sensibilización ‘#TrabajamosParaVivir’, con el objetivo de visibilizar el “drama humano y social” que supone la siniestralidad laboral. La campaña autonómica incluye una serie de vídeos testimoniales difundidos en redes sociales, cuñas de radio, y material gráfico en mobiliario urbano, informa Ical.
✕
Accede a tu cuenta para comentar