JxCat maniobra para reformar el reglamento del Parlament con Puigdemont en la sombra

La crisis sanitaria del coronavirus ha vuelto a reabrir un viejo debate en la política catalana: la posibilidad de celebrar sesiones y plenos parlamentarios telemáticos con el transfondo inevitable de Carles Puigdemont, una hipotética investidura a distancia o la posibilidad de que sea diputado. A raíz del confinamiento decretado, Junts per Catalunya ha maniobrado para presentar una proposición de ley de modificación del reglamento de la cámara al margen de los grupos con el fin de lograr una reforma por la "vía exprés”, un extremo que Esquerra dijo ayer no compartir.

Aún así, su texto ha sido admitido a trámite esta mañana por la Mesa de la cámara ya que cumple con los requisitos técnicos necesarios, y se llevará a la Junta de Portavoces para debatirlo. Otras fuentes parlamentarias han detallado a Europa Press que grupos de la oposición se han opuesto a su tramitación, pero no a su admisión a trámite ya que cumple con todos los requisitos reglamentarios. Los postconvergentes buscan aprobarlo por el procedimiento de urgencia y lectura única, algo que parece casi imposible mirando al resto de grupos.

En concreto, la propuesta de reforma de JxCat indica que podría haber sesiones “no presenciales” cuando la capacidad de desplazamiento de los diputados se vea “gravemente afectada” como consecuencia de “catástrofes naturales o accidentes graves y a gran escala, crisis sanitarias y episodios graves de contaminación, o parálisis de los servicios públicos esenciales”. Hasta aquí, ninguna novedad con respecto al texto que ERC busca consensuar con los demás partidos.

La puerta se abriría, no obstante, con el artículo 3: “En las sesiones presenciales, también se computan como presentes los miembros de la Cámara que participan o votan telemáticamente porque la Mesa les ha autorizado expresamente a hacerlo”. Es decir, un redactado que permitiría la participación de diputados a distancia incluso cuando los plenos se celebren en la cámara, una propuesta que parece tener a Puigdemont en la sombra.

Cabe recordar además que el president Torra anunció que convocaría elecciones cuando se aprobaran los presupuestos para 2020, un escenario que ha quedado en “stand by" por la crisis del coronavirus pero que hace inevitable unas elecciones autonómicas a corto-medio plazo. Y en los anteriores comicios, Puigdemont prometió volver a Cataluña y luego forzó al máximo para ser investido a distancia, algo que ERC finalmente frenó despertando airadas críticas entre los postconvergentes.