El PP denuncia la “inmoralidad” de la Generalitat por subir un 17% el impuesto de sucesiones en plena pandemia

El líder del PP en el Parlament, Alejandro Fernández, ha aprovechado la sesión de control de hoy para denunciar el “hachazo fiscal” que conlleva la ley de acompañamiento de los presupuestos aprobada el pasado 24 de abril por JxCat y ERC con la abstención de los “comunes”. En concreto, ha denunciado la decisión del Govern de subir un 17% el impuesto de sucesiones en plena pandemia del coronavirus “con miles de muertos en Cataluña”.

“Una decisión de una mezquindad e inmoralidad difícilmente descriptibles”, ha reprochado Fernández al vicepresidente económico, Pere Aragonès (ERC), tras clamar también contra la subida de impuestos al turismo “en el peor momento posible”.

A la práctica, en la nueva ley de 5/2020 de medidas fiscales, financieras y administrativa se reducen las bonificaciones para los hijos mayores de 21 años y para los ascendientes -introducidas por el Ejecutivo de Artur Mas- lo que implica un importante incremento del tributo.

El líder del PP también ha puesto en cuestión la “política industrial” del Ejecutivo teniendo en cuenta el anuncio de Nissan de cerrar las tres plantas catalanas -Zona Franca, Sant Andreu de la Barca y Montcada- a finales de año.

"Usted ya se ha inaugurado hoy como el ‘cayetano’ del Parlament de Cataluña utilizando la descalificación del adversario como argumento”, le ha replicado Aragonès sin entrar en la subida de impuestos y acusando a Fernández de “demagogia”. Tras el choque directo, el republicano sí ha asegurado que el Govern irá “hasta donde haga falta” para defender la continuidad de los puestos de trabajo de Nissan tras el anuncio de la compañía de cerrar las plantas que tiene en la comunidad autónoma.

“El Govern está al lado de los trabajadores de Nissan. Iremos hasta donde haga falta para defender la continuidad de los puestos de empleo porque la economía y la industria de este país tiene futuro y es gracias a sus trabajadores”, ha defendido. Además, ha insistido en que no dan “la batalla por perdida” y que trabajarán para que la marca japonesa mantenga abiertas las plantas poniendo en valor los activos del sector automovilístico catalán.