La patronal del ocio denunciará a la Generalitat: “Nos condenan a la ruina sin piedad”

Las patronales del ocio nocturno en Cataluña no se van a quedar con los brazos cruzados mientras la Generalitat les cierra sus negocios durante, mínimo, quince días, tal y como ayer anunció el flamante secretario de Salud de la Generalitat, Josep Maria Argimon. Dos de estas patronales, Fecalon y Gremio de Salas de Discotecas de Barcelona y Provincia, incluso llevarán a los tribunales el cierre de discotecas en Cataluña ordenado por el Procicat. A su juicio, la medida “no está justificada”.

La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades Recreativas Musicales (Fecasarm) se ha mostrado, además, muy crítica con la medida de restringir a medianoche el horario de bares, restaurantes, terrazas y bares musicales. “Es absolutamente desproporcionado”, considera la entidad. El portavoz, Enric Gomà, acusa a la Generalitat de “cargarse de golpe” todo el sector. Fecasarm, además, alerta de un posible incremento de los “botellones” y las fiestas particulares con las nuevas restricciones porque, dice, los jóvenes ya no tendrán donde consumir bebida. La patronal de ocio nocturno se mostró “sorprendida” con la decisión anunciada por el Departamento de Salud al considerar que todos estos establecimientos cumplen las medidas de higiene y de seguridad necesarias. En Barcelona, hace casi una semana que las discotecas permanecen cerradas por el incremento de los contagios, una obligación que desde este fin de semana se extiende en toda Cataluña. “La Generalitat vierte a miles de familias a la ruina de manera innecesaria y sin piedad”, dice la entidad en un comunicado. Fecalom y el Gremio de Salas, por su parte, denunciaron que la medida “deja en la más absoluta indefensión y ruina a las más de 35.000 empresas del sector y sus más de 37.000 familias”, y acusaron al Procicat de no haber estudiado ni contestado al plan de desescalada presentado por el sector “hace más de 20 días”.

El sector defiende que en los últimos meses han propuesto alternativas para evitar restricciones, como una aplicación que permite trazar las personas que han asistido, por ejemplo, a un bar musical. Así, en caso de detectar un positivo, se puede contactar con las personas con rapidez. “Finalmente, no ha servido para nada”, lamenta Fecasarm.

Ante esta situación, las patronales del ocio nocturno tampoco entienden que no se haya solicitado una ratificación judicial para el cierre al entender que existe una vulneración “de Derechos Fundamentales”. Este cierre, afirman, provoca “perjuicios irreparables por haber adquirido las actividades los correspondientes suministros y servicios”.