Baja la velocidad de contagio, pero no basta para salvar a las ucis del colapso en enero

En tiempos en que las ciudades tenían murallas, el centinela era el guardia emplazado en un puesto de observación que daba la voz de alarma en caso de un eventual ataque o de la llegada de cualquier otro peligro. Su trabajo era anticiparse a las amenazas. Y en tiempos de pandemia y tras dos olas que han dejado aprendizajes, Cataluña ha creado un grupo al que llama centinela y que ayuda a los epidemiólogos a anticipar cómo avanzará el virus. Más que un grupo, con nombre y apellidos, los datos centinela se calculan a partir de los resultados de los test de antígenos, que dicen si una persona está o no infectada de Covid-19 en quince minutos y ofrecen una fotografía más actual de la evolución de la pandemia que las pruebas PCR, que tardan ente 24 y 48 horas en dar un diagnóstico. Con estos y otros datos, los epidemiólogos calculan cómo evolucionará el virus. Pues bien, los datos que llegan del grupo centinela, que indican que la curva epidémica se aplana en vez de seguir creciendo, parecen consolidarse: la velocidad de propagación baja en las últimas horas de 1,52 a 1,40 y la curva se estabiliza a tres días de Navidad. Esto quiere decir que por cada 100 infectados se contagian 140 personas. Pero a finales de esta semana, la velocidad de transmisión podría quedaren tablas, es decir, que por cada infectado haya un contagio.

La previsión para los próximos días es que superado el impacto del Puente de la Purísima, finalizados los colegios y con las nuevas restricciones en vigor -los bares y restaurantes no sirven meriendas ni cenas-, la Rt bajará el jueves a 1,19-1,21. Los cálculos de @CoronaDades se han cumplido, por ahora, la velocidad de transmisión ha bajado hoy a 1,4 y si se siguen cumpliendo, mañana la Rt bajará a 1,3 y a finales de semana rozará la simbólica Rt de 1 -por debajo de 1 la transmisión decrece y por encima de 1, crece-.

Según el último parte del portal Dades Covid del departamento de Salud, el riesgo de rebrote baja nueve puntos hasta 357, aunque la incidencia acumulada en los últimos catorce días sigue sin estabilizarse y crece de 257 a 270 casos por cada 100.000 habitantes.

En las últimas horas, se han registrado 2.235 nuevos casos de coronavirus confirmados por PCR y test de antígenos. Desde el inicio de la pandemia, se han infectado al menos 375.326 personas en Cataluña. También se han declarado 32 fallecidos que se suman a las 16.623 personas que han pedido la vida por Covid-19 en el último año.

Los hospitales al acecho

El último parte de los hospitales es algo mejor que la víspera: hay 1.610 pacientes ingresados por coronavirus, trece menos. La mala noticia es que han ingresado siete enfermos más en la UCI, donde hay ya 334 pacientes con coronavirus. En este caso, se confirma el tópico de que las malas noticias nunca vienen solas. Las unidades de cuidados intensivos están al 80% de su capacidad, entre pacientes covid y no covid, pero el problema es que en la última semana los casos diarios han pasado de una media de mil a 2.000. La curva se ha estabilizado a niveles muy altos. Una velocidad de transmisión de 1,4 quiere decir que la epidemia crece y esto, según los cálculos que hace el departamento de Salud para anticiparse al virus, quiere decir que la próxima semana habrá más de 400 pacientes en la UCI y la primera semana del año más de 600. Para doblar la curva y dar un respiro a los hospitales, la Rt debería estar por debajo de 1. Otro dato que confirma que la el virus está en expansión es que la positividad de los test supera el 5%, cifra con la que la Organización Mundial de la Salud (OMS) da por controlada la pandemia.

Campaña de vacunación

Mientras los hospitales se preparan para atender a un gran número de pacientes los próximos quince días, un equipo de 500 enfermeras voluntarias se entrena para empezar a poner la vacuna anticovid de Pfizer/BioNtech a partir del domingo.

Las enfermeras, repartidas en 26 grupos, en la primera fase de la campaña de vacunación se trasladarán a las residencias. Las primeras 200.000 vacunas que llegarán servirán para vacunar a los cerca de 104.000 residentes que viven en las 1.408 residencias que hay en Cataluña. En diez días, la subdirectora general de Promoció de la Salut, Carmen Cabezas, confía en haber llegado a todos los geriátricos. Sólo se vacunará a las personas que no sean positivas y no tengan síntomas como fiebre.