Los sindicatos independentistas boicotean un día normal de clase en la universidad

El Sindicat d’Estudiants dels Paísos Catalans (SEPC), el brazo más activo y movilizado en la huelga docente de hoy, ha llenado el en teoría terreno neutral de pegatinas y todo de tipo de carteles y artefactos para tratar de impedir que se desrrolle un día normal de clase en el campus de La Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.

Además, ya habían colocado numerosas pancartas en contra del castellano como lengua vehicular en la enseñanza catalana en sitios estratégicos, como puentes.

Hace más o menos un mes, ya volvió la tensión identitaria a las universidades catalanas. Esta vez a la Universitat Pompeu Fabra (UPF), donde miembros del Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC) han echado a empujones a los integrantes de la asociación estudiantil S’ha Acabat!, que habían montado una carpa informativa en una muestra de asociaciones en el campus Ciutadella de la UPF.

Un grupo de miembros del SEPC se ha enfrentado a los de S’ha Acabat! con el objetivo de expulsarlos del campus, donde ambas entidades habían instalado puestos tras haberse registrado para participar en la muestra, autogestionada por el Consell d’Estudiants de esta universidad pública barcelonesa. Los miembros del SEPC han gritado: “Fora feixistes de la universitat!” durante la protesta, en la que han expulsado a los de S’ha Acabat!

En varios vídeos colgados en Twitter se ve el forcejeo entre varias decenas de personas, que también han usado botes de humo en el patio de la facultad de Derecho.  La portavoz del SEPC, Marta Daviu, detalló que su objetivo era “hacer frente” a S’ha Acabat! por los vínculos que, a su juicio, esta asociación mantiene con la extrema derecha.

A su vez, el vicepresidente de S’ha Acabat!, Jordi Salvadó, ha lamentado la “actitud hostil” de un grupo de unas 50 personas.