Barcelona

El Taller Masriera renace convertido en ágora urbana

El proyecto ganador apuesta por integrar jardín, luz natural y patrimonio en un solo espacio

El Taller Masriera renace convertido en ágora urbana
El Taller Masriera renace convertido en ágora urbanaEP

El histórico Taller Masriera, situado en el número 70-72 de la calle Bailèn, se convertirá próximamente en un nuevo equipamiento sociocultural de referencia en el barrio barcelonés de la Dreta de l’Eixample. El Ayuntamiento de Barcelona ha resuelto el concurso de proyectos que permitirá encargar la redacción del anteproyecto de adecuación y rehabilitación del edificio, que acogerá los nuevos usos de la Biblioteca Sofia Barat, un teatro-sala de actos y un espacio comunitario y vecinal.

La propuesta ganadora ha sido presentada por la UTE formada por Estudi Länk Arquitectes SCP y DATAAE, seleccionada entre diez finalistas. El jurado, compuesto por representantes del distrito del Eixample, Biblioteques de Barcelona, Patrimoni, el Col·legi d’Arquitectes de Catalunya (COAC), el vecindario y la empresa municipal BIMSA, ha valorado especialmente la calidad arquitectónica del proyecto y su sensibilidad hacia el patrimonio y el entorno urbano. La propuesta parte de una premisa clara: recuperar el carácter original del Taller Masriera como edificio rodeado de un jardín.

Para ello, se eliminarán ampliaciones posteriores que desdibujaron su volumetría original y se integrará una nueva arquitectura ligera, abierta y ajardinada que prolongue la presencia del verde hacia el interior de la isla. De esta manera, el pequeño jardín de entrada se convertirá en un elemento vertebrador del nuevo equipamiento, extendiendo su influencia desde la calle Consell de Cent hasta el patio de manzana.

Uno de los elementos centrales del proyecto es la recuperación del vestíbulo histórico, que se transformará en una gran ágora comunitaria. Este espacio recuperará su altura original y una iluminación cenital mediante una lucerna, convirtiéndose en un punto de encuentro accesible, luminoso y cargado de historia. Además, la terraza del pórtico neoclásico conectada con el jardín actuará como una extensión natural del nuevo espacio público.

Entre los criterios valorados por el jurado destaca la apuesta por la renaturalización de la parcela, que pretende conectar la futura pacificación de Consell de Cent con la posible recuperación verde del interior de isla. También se subraya la estrategia de vaciados interiores para generar espacios amplios y bien iluminados de forma natural, y la reorganización funcional del edificio en tres grandes bloques que responden con eficiencia a las necesidades culturales y sociales del barrio.

El proyecto también contempla la restauración del antiguo teatro Studium, con una intervención respetuosa que moderniza su uso. Se dotará de una platea con sistema de tarimas elevables, lo que permitirá distintas configuraciones para su uso como espacio polivalente. El aforo previsto de la sala será de 278 personas en formato de teatro frontal, con mejoras en el escenario, el equipamiento técnico y los espacios auxiliares.

El concejal del Eixample, Jordi Valls, destacó que este proyecto es fruto de un amplio proceso de consenso: «Se ha trabajado intensamente para dar respuesta a las diversas necesidades del barrio y sensibilidades del entorno, y eso se traduce en un único equipamiento con usos compartidos que recupera un edificio patrimonial y lo proyecta hacia el futuro con una arquitectura de calidad».

Con el concurso ya resuelto, el siguiente paso será la firma del contrato y la redacción del anteproyecto, que tendrá un coste de 83.000 euros. La previsión municipal es disponer del documento en noviembre de este año, para posteriormente licitar el proyecto básico y ejecutivo. Las obras de rehabilitación del edificio se plantean para el próximo mandato.

El nuevo Taller Masriera, por tanto, se perfila como un equipamiento singular y emblemático, que combina historia, cultura, naturaleza y comunidad.