Astronomía

Demuestran que el universo está dentro de un agujero negro

“Aún no está claro qué causa esto, pero hay dos posibles explicaciones” principales”, señalan los autores del estudio.

Telescopios James Webb
De las 32 galaxias que aparecen en la imagen, 24 giran en un sentido, lo que desafía la idea de un universo simétrico.JWST/ShamirJWST/Shamir

Han pasado apenas poco más de tres años, pero el Telescopio Espacial James Webb de la NASA no deja de sorprendernos. Y la última sorpresa llega de la mano del análisis de cientos de galaxias: nuestro universo estaría en un agujero negro.

Al analizar imágenes para el Sondeo Extragaláctico Profundo Avanzado (JADES) del telescopio, Lior Shamir, de la Universidad Estatal de Kansas, descubrió que, de las 263 galaxias examinadas, dos tercios giraban en sentido horario, mientras que solo un tercio lo hacía en sentido antihorario, como se detalla en un estudio publicado en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.

Esto desafía la suposición de que en cualquier universo dado la mitad de sus galaxias giran en un sentido y el resto en sentido contrario.“Aún no está claro qué causa esto, pero hay dos posibles explicaciones principales – explica Shamir en un comunicado de prensa . Una explicación es que el universo nació girando”.

Esta explicación concuerda con teorías como la cosmología de agujeros negros, que postula que todo el universo es el interior de un agujero negro. Los hallazgos también refuerzan una teoría preexistente, similar a la de las muñecas rusas, llamada cosmología de Schwarzschild, que sugiere que nuestra galaxia está atrapada dentro de un agujero negro, que a su vez se encuentra dentro de otro universo.

Esto implicaría que otros agujeros negros observados podrían ser agujeros de gusano, también conocidos como puentes de Einstein-Rosen, que conducen a otros universos, que son inobservables para nosotros debido a que los agujeros negros atrapan la luz en su interior.

“Creo que la explicación más simple del universo en rotación es que el universo nació en un agujero negro en rotación – explica el físico teórico de la Universidad de New Haven, Nikodem Poplawski, quien defiende la teoría de que estamos rodeados de puertas a otros universos y no participó en la investigación -. Un eje preferente en nuestro universo, heredado por el eje de rotación de su agujero negro original, podría haber influido en la dinámica de rotación de las galaxias, creando la asimetría observada en sentido horario y antihorario”.

En un universo aleatorio, el número de galaxias que giran en una dirección debería ser aproximadamente el mismo que el número de galaxias que giran en la otra dirección. Por tanto, el hecho de que el telescopio espacial James Webb muestre que la mayoría de las galaxias giran en la misma dirección es inesperado. La Tierra también gira alrededor del centro de la Vía Láctea y, debido al efecto de desplazamiento Doppler, se esperaba que la luz proveniente de galaxias que giran en sentido opuesto a la rotación de la Tierra sea generalmente más brillante debido a este efecto.

Este efecto se puede resumir del siguiente modo, de acuerdo con la Sociedad Española de Astronomía. Cuando un objeto que emite luz, como una estrella o una galaxia, se acerca a nosotros, vemos sus ondas de luz desplazadas al azul, en cambio, si se aleja de nosotros, vemos que su luz se desplaza al rojo. Como además el efecto es tanto más intenso cuanto mayor sea la velocidad entre el emisor y el receptor, podemos usar el efecto Doppler para calcular la velocidad de las estrellas y galaxias respecto de nosotros.

"El descubrimiento del JWST de que las galaxias giran en una dirección preferida respaldaría la teoría de que los agujeros negros crean nuevos universos, y me entusiasmaría enormemente que estos hallazgos se confirmaran", añade Poplawski.

Sin embargo, los hallazgos de Shamir aún plantean la posibilidad de que la propia rotación de la Vía Láctea haya influido en la inusual distribución de la rotación de las galaxias.

Dado que la Tierra gira alrededor del centro de la Vía Láctea, los científicos esperan que la luz de las galaxias que giran en sentido opuesto sea más brillante, lo que causa la discrepancia en las observaciones de JADES, sugiere Shamir.

En otras palabras, la velocidad a la que gira la Vía Láctea podría estar influyendo en nuestras mediciones celestes, que anteriormente se consideraban insignificantes.

“Si ese es el caso, tendremos que recalibrar nuestras mediciones de distancia para el universo profundo”, concluye Shamir. La recalibración de las mediciones de distancia también puede explicar otras cuestiones cosmológicas sin resolver, como las diferencias en las tasas de expansión del universo y las grandes galaxias que, según las mediciones de distancia existentes, se espera que sean más antiguas que el propio universo.