“Si hubiese tenido que coger trabajadores del Erte no habría podido abrir hoy el restaurante”

Miguel Guillot ha vuelto a abrir hoy uno de los dos restaurantes que regenta. La experiencia ha sido positiva, aunque admite que el primer día se cuenta con el efecto novedad. “Había inquietud entre la clientela”. El TapaVid situado en una zona próxima al centro de Valencia ha abierto sus puertas por una sencilla razón. “Aquí trabajamos mi mujer, mi hija y yo. Si hubiese tenido que coger a trabajadores que están ahora mismo en un Erte no lo hubiese podido hacer”. Explica que son los tres autónomos y que se han pasado tres días cocinando en familia. “Si el cliente te ve, no te olvida”.

Ilusionado y sobre todo esperanzado cuenta cómo durante la última semana han trabajado a conciencia para que todo estuviese preparado. Al hecho de que fuese la primera vez que hacían comida para llevar se ha añadido la dificultad de preparar todas las medidas para garantizar que los clientes recogían sus pedidos con total seguridad.

“Lo primero que hemos hecho ha sido adaptar la carta a platos que lleguen en buenas condiciones a casa”. En esta selección de 20 platos no han olvidado los que más gustan a sus habituales porque, eso sí, Guillot asegura que todos los pedidos han sido de clientes que ya conocían su restaurante.

También han tenido que dedicar mucha atención a la preparación de local. Guillot afirma que se ha organizado de tal manera que se garantiza la distancia marcada por el Ministerio de Sanidad. “El cliente no llega a entrar al restaurante y además, hemos organizado un turno de recogida para que no se forme cola en la puerta”.

Ahora, Guillot espera pacientemente la fecha prevista para abrir los restaurantes con la “nueva normalidad”. A partir del 25 tiene previsto comenzar a servir comidas en su otro restaurante, el Asador La Vid, un local que no ha abierto porque no podía permitirse recuperar a los seis trabajadores solo para servir comidas para llevar.