Infraestructuras

Cómo repensar la Estación Central para el «efecto Corredor»

La previsión es que la mejora de los tiempos dispare el número de pasajeros anuales hasta los 9,5 millones en 2025

Salida de uno de los trenes AVE de la estación Joaquín Sorolla de València.
Salida de uno de los trenes AVE de la estación Joaquín Sorolla de València.Ana EscobarAgencia EFE

Planificar sin dejarse llevar por el efecto pandemia. Las restricciones de movilidad impuestas de manera interrumpida desde el pasado mes de marzo no han condicionado los estudios que el Ministerio de Fomento ha realizado para revisar la previsión de tráfico que supondrá la finalización del Corredor Mediterráneo.

Su puesta en marcha supondrá una mejora significativa en los tiempos de viaje y, por tanto, se prevé un incremento de la demanda motivada también por la consolidación de la liberalización del transporte de pasajeros en el trayecto con Madrid.

Teniendo en cuenta estos dos factores, Adif ha elaborado unas previsiones que apuntan que a la ciudad de Valencia llegarán 9,5 millones de pasajeros en 2025, frente a los 3,8 que recibió en 2018.

De estos, 3,5 millones vendrán gracias a la ansiada finalización del Corredor Mediterráneo, pero también se espera un destacable aumento del uso del tren en trayectos dentro del territorio valenciano.

El viaje en alta velocidad entre Valencia y Alicante recibirá en 2025 dos millones de pasajeros frente a los 126.000 registrados en 2018.

Para asumir este aumento el Ministerio de Fomento se ha visto obligado a replantear una vez más la Estación Central de Valencia. La estación provisional de Joaquín Sorolla, que ya ha cumplido diez años, será insuficiente, pero también las prestaciones recogidas en los cinco proyectos realizados a lo largo de las décadas en la obra que, junto al canal de acceso revolucionará de manera definitiva la conexión ferroviaria en Valencia.

En el último diseño del Ministerio de Fomento se prevé pasar de los dos niveles con seis vías y tres andenes por nivel, a ocho andenes en una segunda planta y otro para trenes de ancho estándar.

Mientras estas obras se acaban de definir, Adif prevé ejecutar reformas en la estación de Joaquín Sorolla para ampliar de nueve a diez las vías de estacionamiento y también su longitud. Esta reforma permitirá que haya siete vías de 200 metros y tres de 400 metros. Se habilitarán también dos vías de ancho internacional en la Estación del Norte para los trenes de Castellón.

Los retos ferroviarios para 2021

Este año recién estrenado tiene ya marcados seis objetivos que deben cumplirse para garantizar el ritmo de ejecución comprometido en el Corredor Mediterráneo. Desde el Comisionado del Gobierno central, que vigila la ejecución de estas infraestructura, se prevé que la puesta en servicio del tren de alta velocidad entre Elche y Orihuela, así como la del tramo que va de Moixent a La Encina.

Se trata de una pieza imprescindible para concluir el Nudo de la Encina y que permitirá poner en marcha de una vez por todas hacer realidad el AVE regional. La planificación prevista contempla también la licitación del cambio de ancho entre Tarragona y Castellón, así como la renovación del tramo entre Algeciras y Bobadilla. Además, el ritmo de los trabajos permite asegurar que estarán concluidas las obras de ampliación de gálibo y el ancho mixto en los túneles de Castellbisbal.

Para el mes de septiembre se ha asegurado la presentación de los estudios informativos del túnel pasante de la ciudad de Valencia y el de la nueva plataforma ferroviaria entre Valencia y Castellón. También se ha anunciado licitar la obra de remodelación de la estación de Joaquín Sorolla. Con todas ellas, la ejecución del Corredor Mediterráneo seguirá un camino que, según prometió el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, debería concluir en 2025.