Las nuevas restricciones por la sexta ola planean sobre la hostelería valenciana de cara a la Navidad

La Conselleria de Sanidad de la Comunitat Valenciana ha convocado para mañana a una reunión a las organizaciones de hosteleros y hoteleros con el fin de estudiar la situación epidemiológica en la región y escuchar sus opiniones acerca de la posibilidad de implantar nuevas medidas de carácter restrictivo.

La convocatoria se produce horas antes de que la Comisión de Salud Pública del Ministerio de Sanidad anuncie mañana por la tarde a las comunidades autónomas la decisión de estudiar la posibilidad de volver a implantar restricciones en la hostelería y el ocio nocturno ante el incremento exponencial de contagios que se viene produciendo a lo largo de las últimas semanas.

Según ha avanzado La Vanguardia, Sanidad analiza adelantar el cierre de bares y restaurantes a las 23 horas y los locales de ocio, a la 1 de la madrugada. También reducir aforos al 50% en el interior y reducir los comensales a 10 personas, así como la prohibición de comer y beber en barra.

Estas decisiones serán trasladadas mañana a todas las comunidades autónomas y es muy posible que, como ha sucedido en otras ocasiones, se deje en manos de las autonomías la decisión última de aplicarlas o no. Hay que recordar que, hasta ahora, la Comunitat Valenciana ha cumplido siempre con las “recomendaciones” realizadas desde el Ministerio de Sanidad, un asunto en el que el color político de cada región también influye, de manera que las regiones gobernadas por la izquierda son más propensas a acatar las instrucciones de Sanidad.

Según fuentes de la Conselleria de Sanidad, es muy probable que en el encuentro se trate también la implantación del pasaporte covid en la Comunitat-el presidente Ximo Puig anunció ayer que se hará efectiva antes del puente de la Constitución- aunque no se abordará la aplicación específica, es decir, no se explicará cómo se ha de llevar a cabo este control del documento en los locales.

Aunque desde Sanidad se insiste en que la situación hospitalaria todavía no es preocupante, lo cierto es que, a un mes de Navidad, el crecimiento tanto de los contagios como de los ingresos hospitalarios -indicador más preocupante- está creciendo ya a unos niveles casi alarmantes.

A lo largo de la última semana los ingresos por covid en los hospitales valencianos han aumentado un 26,45 por ciento, y se sitúan en 325 personas hospitalizadas. En cuanto a la incidencia acumulada a 14 días, ha aumentado en la última semana un 51,15 por ciento, y se sitúa en este momento en 133,15 casos por 100.000 habitantes, es decir, en riesgo medio.

La situación empieza a asemejarse a la vivida por las mismas fechas del año pasado, con un incremento de contagios e ingresos a lo largo de noviembre y diciembre que desembocó tras las fiestas navideñas en la ola más terrible de las vividas hasta ahora. Si bien es cierto que con el 90 por ciento de la población vacunada los datos deben interpretarse bajo otro prisma, el Ministerio ha tenido bien plantearse si no es hora de aplicar nuevas limitaciones, sobre todo por la inminencia de un puente de cinco días y de las fiestas navideñas.

“Nos toca ser policías otra vez”

Mientras tanto, los hosteleros vuelven a encontrarse en medio de una situación repleta de incertidumbre. Sin saber el sistema que deberán utilizar para el control del pasaporte covid, ni a qué locales afectará, ahora se enfrentan de nuevo a la posibilidad de nuevas restricciones.

“Nos toca ser policías otras vez”, señala el portavoz de Ashotur, la Asociación de Hosteleros de Castellón, Juan Carlos Vidal. Asegura que no están a favor de la implantación de este documento en la hostelería, aunque “si es la única posibilidad que tenemos de que todo funcione con cierta normalidad, la aceptamos”.

Por su parte, desde la Federación de Hostelería de Valencia, confían en que durante la reunión de mañana la Conselleria les aclare los locales y circunstancias en las que será necesario el control del certificado covid. Aseguran que este tipo de medida es efectiva en el ocio nocturno o en eventos como bodas y banquetes, pero es muy difícil de aplicar en los bares y restaurantes.