Economía

El sector cerámico pide al Gobierno de España ayudas directas sobre el precio del gas

La Generalitat valenciana apoyará las demandas del sector frente al Ejecutivo central

Imagen de la feria del azulejo cerámico y mobiliario de baño Cersaie de Bolonia
Imagen de la feria del azulejo cerámico y mobiliario de baño Cersaie de BoloniaKai FörsterlingAgencia EFE

Las ayudas anunciadas por el Gobierno central para las empresas del sector cerámico -que podrán ser de hasta 400.000 euros por compañía- serán útiles, pero solo un “parche” para hacer frente al imparable aumento del precio del gas, que se ha convertido ya en inasumible para una industria de consumo intensivo de esta energía. Así lo ha asegurado esta mañana el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer), Vicente Nomdedeu, en la feria Cersaie de Bolonia.

Nomdedeu ha insistido en que, frente a un escenario futuro en el que no está previsto que el precio del gas se reduzca, las ayudas estatales deberían ir más encaminadas a bonificar de manera directa el aumento del precio de la factura, de forma que el beneficio de tesorería se sentiría de manera mensual y repercutiría en un balance de negocio positivo. Este sistema, ha señalado, es el que se está aplicando ya en Italia -otro de los grandes fabricantes de productos cerámicos- donde el Gobierno computa a las empresas el 40 por ciento del aumento del precio del gas en impuestos. Nomdedeu ha advertido también de la desventaja competitiva que puede suponer para las empresas españolas que sus principales competidores cuenten con estas ayudas.

Por ello, la patronal cerámica exigirá al Gobierno central que las medidas de ayuda al sector vayan encaminadas en este sentido, una petición para la que cuentan con todo el apoyo de la Generalitat valenciana. “El Gobierno central tiene que dar más dinero, porque además puede hacerlo, ya que ha ingresado 20.000 millones por IVA de la factura eléctrica. Tenemos que hacerle ver que lo mejor es repercutir ese dinero en un sector estratégico como el nuestro”, ha señalado.

“Este sector no ha pedido ayudas nunca, todas las inversiones que ha desarrollado han sido con capital privado y, en este momento, si no vienen ayudas de la administración va a ser difícil que se supere la crisis, que será dura y larga”, ha indicado el presidente de Ascer.

Ayudas de la Generalitat

Por su parte, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, que ha realizado un recorrido por las principales empresas valencianas presentes en el certamen, ha anunciado que el Consell complementará las ayudas del Gobierno central de manera proporcional, con un máximo de 500.000 euros por empresa. “Es necesario pasar esta transición de precios del gas que hace inviable al sector, y hay que pasarla a través de ayudas directas que pueden ser ayudas que actúen sobre el precio del gas como aquí en Italia se está haciendo, o puede ser otro tipo de ayudas más directamente a las empresas”, ha señalado el presidente.

Ha añadido que desde el Gobierno valenciano y también desde la región Emilia-Romagna, se pedirá a la Unión Europea que no haya dentro de Europa “países que tengan más ayudas que otros” de manera que no se produzca una competencia desleal. “Cada gobierno tiene que apoyar de la misma manera o de una manera semejante a los productores de su país. Para España, no solo para la Comunidad Valenciana, este sector es un sector fundamental en su balanza de pagos, es un sector que exporta más del 90% de su producción y que tiene una facturación de casi 4.000 millones de euros”.

A mediodía de hoy el presidente Puig mantendrá una reunión con los representantes de la patronal cerámica con el objetivo de fijar las medidas concretas que se solicitarán al Gobierno central.

Balance de la feria

Con respecto al resultado de la feria Cersarie, el presidente de la patronal ha explicado que, aunque las empresas venían al certamen preocupadas por la situación de incremento de costes y descenso de la demanda, “ha sido un alivio venir aquí, estamos en el escalón de salida”, ha señalado, aunque ha advertido que el mercado es muy dinámico y, si dentro de dos meses la situación sigue “igual de mal”, la demanda puede volver a empeorar.