Tráfico

“Las cámaras de vigilancia de Ciutat Vella en València van a dejar sin vida al barrio”

El PP exige a Ribó el fin de estas medidas y denuncia el exceso de multas

Carteles anunciando la zona controlada por cámaras en la plaza de Na Jordana
Carteles anunciando la zona controlada por cámaras en la plaza de Na JordanaLa RazónAjuntament de València

El grupo popular en el Ayuntamiento de València ha pedido al Gobierno municipal que “dé marcha atrás” y cierre las cámaras del Área de Prioridad Residencial (APR) de Ciutat Vella, al considerar que esta medida “solo sirve para hacer caja”.

Según asegura el Partido Popular en un comunicado, el Gobierno municipal ha recaudado, en menos de un año y hasta el mes de noviembre, más de 1,5 millones de euros con la imposición de 117.161 multas.

“Las restricciones de Ciutat Vella van a dejar sin vida al barrio”, aseguran desde el grupo popular, que insiste en que se escuche a vecinos y comerciantes, ya que ninguno de ellos quieren que sigan en marcha esta cámaras.

Los populares insisten en que se apaguen las cámaras porque están provocando el cierre de comercios en toda esta zona de la ciudad al no poder acceder los clientes, y señalan que el Gobierno de Compromís y PSOE “multa de media cada día a más de 300 personas por entrar en su vehículo en la zona de APR de Ciutat Vella, lo que significa una media desde que se puso en marcha de 10.000 multas al mes”.

“La recaudación acumulada hasta noviembre es de 1.574.213 euros con un cúmulo de 117.161 multas”, subraya la portavoz del PP en la ciudad de Valencia, María José Catalá, quien ha exigido “al alcalde Ribó y sus socios del PSOE que se siente de una vez por todas con vecinos, asociaciones y comerciantes afectados porque continúa la sangría de multas y el afán recaudatorio de Ribó parece que no tiene fin”.

Para el PP “alcanzar el consenso con los afectados es un compromiso que cumpliremos al alcanzar la alcaldía el próximo año 2023″, ha asegurado Catalá, quien añade que, con estas cifras, “es evidente que no ha habido campañas informativas como si se ha hecho en otras ciudades”.

“La medida entró en vigor en diciembre del año pasado con la posición en contra de comerciantes, falleros y vecinos de la zona. Acudieron al pleno a pedir que no se comenzara a multar, pero han proseguido haciendo caja con las multas en la APR”, ha explicado.

Según Catalá, “han subido impuestos y tasas en plena crisis económica por la covid, quieren cobrarnos por aparcar bajo de casa y ahora nos fríen a multas por entrar en Ciutat Vella”.

“Nos parece un nuevo escándalo del gobierno de Ribó y PSOE que no ejecutan las inversiones por su nula gestión, pero sí recaudan del bolsillo de los ciudadanos con el IBI más alto de España según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU)”, ha concluido Catalá.