Nuevo error ferroviario: El PP denuncia que los puentes del trayecto Alicante-Dénia no soportan el peso de los trenes

Después del error garrafal al que se ha asistido esta semana con el diseño de trenes que no cabían por los túneles, y que ha supuesto la dimisión de altos cargos de Renfe, el PP de la Comunidad Valenciana denuncia otro caso de fallo en los cálculos ferroviarios. De este modo, el portavoz adjunto del Grupo Popular en les Corts, Miguel Barrachina, ha denunciado que “los nuevos trenes de la línea 9 del Tram de Alicante entre Alicante-Dénia no pueden pasar por los puentes de la línea por exceso de sobrepeso”.

Miguel Barrachina pide que “se depuren responsabilidades políticas tal y como ha ocurrido con el caso de los trenes de Asturias y Cantabria” y que a los usuarios de esta línea del Tram se les pague íntegramente los billetes hasta que se solucione el problema”.

Así, el diputado popular ha asegurado que “estos trenes tienen un peso de 63 toneladas y los puentes no lo soportan. No pasa por ninguno de los 3 puentes metálicos que hay entre Teulada y Benidorm. Los pasajeros se tienen que bajar cuando llegan al primer puente metálico y hacer transbordo”.

“La línea de 100 km que ha inaugurado Puig cuesta 3 horas y un minuto en hacer la distancia. Cuando compraron estos trenes, nadie de la Generalitat Valenciana se dio cuenta que su peso hacia inviable la circulación por esta línea”.

Barrachina ha asegurado que “tienen que coger 3 trenes distintos y hacer 2 transbordos, porque cuando lo coges de Dénia, los puentes metálicos entre Teulada y Benidorm no los aguantan y cuando quieres ir desde Alicante para ir a Dénia los trenes electrificados no caben por los túneles cuando pasa de Benidorm, porque son estrechos. Túneles pequeños y puentes que se hunden”.

“Parece increíble que hayan comparado 6 trenes por 43 millones de euros y no se dieran cuenta del peso que tenían. Quien va a sumir la responsabilidad política por tomar estas decisiones tan equivocada”, ha afirmado.

Interpelada hoy a este respecto, la consellera de Obras Públicas, Rebeca Torró, ha señalado que el PP "tiene la cara de cemento armado". Ha indicado que "tras 20 años de abandono de la línea 9 tuvimos que parar la línea por el abandono del PP". Ha defendido que "hemos planificado totalmente y contemplando un simple trasbordo hasta que los tres puentes estén modernizados".

Proceso de "modernización"

De hecho, según fuentes de la Conselleria, la compra de nuevas unidades tranviarias para el TRAM de Alicante "forma parte de un necesario proceso de modernización de la Línea 9 que se ha realizado en los últimos años. Es importante recordar que esta línea tuvo que ser cerrada en 2016 por falta de mantenimiento e inversión por parte del anterior gobierno".

Insisten en que el actual viaducto del Quisi fue construido entre los años 1913 y 1915, como parte de la línea que enlaza Alicante y Dénia. "Las obras de rehabilitación realizadas por FGV en este tramo han permitido que siga abierto a la circulación de los actuales trenes diésel".

No obstante, continúan indicando las fuentes de la Conselleria, "ha sido necesario plantear la construcción de una variante de nueva construcción que posibilite el paso de los estos trenes duales (eléctrico-diésel) incorporados por FGV como parte del plan de modernización de esta línea".

Señalan que se compraron nuevos trenes porque era necesario renovar determinadas unidades que circulan en el TRAM y para ello se escogen unidades más modernas, menos contaminantes y adecuadas para esta línea. "Se trata de unidades tren-tram que permiten hacer el recorrido más rápido y acceder a las zonas urbanas de forma más amable, segura e integrada, ya que combinan las características del tren y del tranvía".

Remarcan, además, que desde que se compraron estas unidades se pusieron en circulación en la red de Alicante y en paralelo, "se ha trabajado en los distintos trabajos de modernización". Señalan que son trabajos que, debido a su envergadura, se han invertido más de 150 millones de euros, se han hecho de forma progresiva y se ha primado siempre mantener el servicio que fuera posible y, en cada momento, "ir ampliándolo con la finalidad de que los vecinos y vecinas recuperara un tren que habían perdido", concluyen.