Cambio climático

El 98,9 por ciento de Alicante y el 81,9 por ciento de Valencia sufren desertificación

El indicador revela la superficie degrada por la actividad del ser humano

GRAFCVA955. ALICANTE, 27/11/2025.- Presentan el 'Atlas de desertificación de España' sus autores, el catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante Jorge Olcina (d) y el científico de la Estación Experimental de Zonas Áridas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Jaime Martínez. EFE/Morell
Jaime Martínez Valderrama, del Centro Superior de Investigaciones Científicas, y Jorge Olcina, de la Universidad de Alicante, han presentado hoy el "Atlas de la Desertificación de España"MORELLAgencia EFE

España se desertifica y la zona de levante es una de las más afectadas por un proceso que define la degradación del territorio por la actividad del ser humano. Así ha quedado de manifiesto hoy en la presentación del “Atlas de desertificación de España” por parte de sus autores, el catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante, UA, Jorge Olcina, y el científico de la Estación Experimental de Zonas Áridas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Jaime Martínez Valderrama.

La provincia de Alicante además es una de la que más acusa ese proceso -que en ningún caso define que se esté convirtiendo en un desierto- con un 98,9 por ciento de su superficie degradada; en el caso de Valencia, el porcentaje es del 81,9 por ciento, mientras que en Castellón es de un 57,3 por ciento.

En el acto, Olcina y Martínez Valderrama han dejado claro que, mientras la aridez se refiere a la condición climática de un terreno, la degradación -de la que da cuenta el citado atlas- refleja cómo la actividad humana ha erosionado el territorio. La desertificación se da por tanto en zonas áridas, semiáridas y subhúmedo-secas.

“El atlas se presenta como una herramienta útil para la gestión hídrica y forestal de España y de la Comunitat Valenciana”, ha destacado Olcina para después añadir que, dadas las condiciones climáticas, los trasvases entre diferentes cuencas, como el Tajo-Segura, ya no son útiles como solución para la desertificación del territorio.

“Habrá que recurrir a trasvases de una misma cuenca, a la desalación de agua y a la regeneración de agua como soluciones”, ha remarcado.

Tal y como refleja el citado atlas, la desertificación es uno de los principales problemas medioambientales.

Su gravedad y extensión no dejan de aumentar -del mismo modo que se expanden las zonas áridas- debido al proceso actual de cambio climático, a un uso insostenible de los recursos naturales y a la falta de actuaciones efectivas para atajar sus causas.

Y, como ejemplo, Olcina ha citado la comarca de la Marina Baixa de Alicante que, siendo rica en recursos hídricos, su sobre explotación llevó a que se aplicaran restricciones de agua el verano pasado.