La Fiscalía reclama una condena de 10 años de prisión para un profesor de un instituto de una localidad de la comarca de la Hoya de Buñol acusado de dos delitos de agresión sexual cometidos al tocar las nalgas a las alumnas de cuarto de ESO.

El Ministerio Público asegura que el procesado entabló con las víctimas una relación de confianza más allá de la habitual en la que llamaba a las alumnas con motes cariñosos, se sentaba junto a ellas en clase o les cogía de la cara para dirigirse a ellas.

El juicio por estos hechos está señalado para el próximo jueves en la Sección Quinta.

Al margen de este proceso, las diferentes secciones penales de la Audiencia Provincial de Valencia han programado para la próxima semana varios juicios por delitos de violencia sexual.

También el jueves en la Sección Cuarta será juzgado un hombre acusado de violar a una mujer el 5 de mayo de 2024 en una calle de Valencia.

La Fiscalía relata que, sobre las cinco de la madrugada, el encausado se acercó encontró a la víctima cuando ésta tenía anuladas totalmente sus facultades debido a la ingesta de bebidas alcohólicas y la forzó sexualmente tras observar que la mujer no podía ofrecer resistencia.

El hombre solo paró cuando vio a una patrulla policial que habían alertado unos viandantes. El Ministerio Fiscal solicita inicialmente una pena de prisión de diez años por un delito de agresión sexual.

El miércoles en la Sección Tercera se ha programado el juicio a un hombre que se enfrenta a una pena de diez años de prisión por un delito continuado de agresión sexual a menor de 16 años tras, presuntamente, mantener relaciones sexuales con una niña, de 14 años en el momento de los hechos, a la que conoció a través de redes sociales.

Procesado y víctima se conocieron a finales del año 2022 cuando y mantuvieron el contado por redes hasta febrero de 2023, cuando concertaron una cita. Según relata el Ministerio Fiscal, el procesado le propuso a la menor ir a casa de él, donde mantuvieron relaciones sexuales pese a que el hombre conocía la edad de la víctima. Los encuentros se repitieron en dos ocasiones más, hasta agosto de 2023, cuando la menor denunció los hechos.

También el miércoles, pero en la Sección Segunda, un hombre se enfrenta a una petición de condena de dos años por un delito de agresión sexual.

La Fiscalía le acusa de coger fuertemente de la nalga a una menor de edad, que tenia 15 años en el momento de los hechos, el 4 de julio de 2024, cuando la víctima entraba en el agua en la playa de la Malvarrosa de Valencia.

Este mismo tribunal verá posteriormente el caso de un hombre acusado de someter a tocamientos a dos mujeres, una de ellas menores, en la piscina municipal de Sueca. Por este motivo la Fiscalía solicita provisionalmente una pena de seis años y medio de prisión.

Los hechos ocurrieron, según relata el Ministerio Público, el 11 de julio de 2024 cuando el procesado coincidió con una de las víctimas, de 46 años, en el interior del agua, lo que aprovechó para realizarle tocamientos. A continuación, se acercó a la menor de edad, que estaba fuera del agua, e hizo lo mismo.

El martes en la Sección Segunda la Fiscalía solicitará de forma provisional una pena de prisión de once años por un delito de agresión sexual sobre menor con prevalimiento por razón de parentesco para un hombre al que acusa de someter a tocamientos y otras prácticas sexuales a su nieta cuando ésta tenía 8 años.

La acusación pública sostiene que, durante el verano de 2015, el encausado aprovechó el apego que tenía con la menor para pedirle que le acompañara detrás del garaje de la vivienda familiar, en una localidad de la comarca de la Hoya de Buñol, donde supuestamente iban a jugar, lo que aprovechó para agredirla sexualmente.

Droga zombi

Antes de la vista mencionada anteriormente, la Sección Segunda tiene previsto juzgar a un hombre que se enfrenta a una petición de condena de tres años y medio de prisión por un delito contra la salud pública.

La Fiscalía le acusa de intentar que un repartidor de una empresa de envíos rápidos llevara a una dirección de Valencia un paquete en el que se localizaron 1,67 gramos de Alpha PVP, una sustancia conocida como la "droga zombi".

Los hechos sucedieron el 14 de noviembre de 2023 cuando, según relata la acusación pública, el procesado recibió en su casa al repartidor que había requerido a través de una aplicación móvil y le entregó un paquete para lo llevara a un domicilio de Valencia.

El repartidor sospechó de la entrega y avisó a la Policía, quien encontró en el interior del paquete dos bolsitas con un polvo blanco que resultó ser la referida sustancia Alpha-PVP.