¿Público o concesión? El Gobierno valenciano contempla "todas las opciones" para los hospitales de Denia y Manises

La Conselleria de Sanidad contempla "todas las opciones" posibles, "del blanco al negro", para la gestión de los departamentos de salud de Dénia y Manises, cuyos contratos con la concesionaria acaban en 2024 y 2025 respectivamente. De esta forma, el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha asegurado hoy que adopatará la decisión una vez tenga los resultados de la auditoría encargada sobre el funcionamiento de todos los departamentos de salud de la Comunitat.

Gómez se ha manifestado de este modo durante la sesión de control de Les Corts Valencianes, donde el diputado socialista Rafa Simó ha mostrado su preocupación por el futuro de estos departamentos de salud, cuyas concesiones acaban en los próximos meses.

Simó ha preguntado si se están siguiendo las normas de reversión para estar preparados en caso de que las auditorías recomienden recuperar este modelo de gestión, y también ha mostrado su temor por que pueda existir ya un acuerdo "oculto" con la empresa Ribera Salud para mantener la concesión.

El conseller ha asegurado que se están realizado los trámites pertinentes y que la semana que viene estará en la plataforma de contratación la información para sacar los pliegos de varios servicios y suministros.

"Yo, que llegué con la mente limpia, sigo con la mente limpia, y sigue estando en mi cabeza del blanco al negro, lo estoy trabajando", ha dicho, y ha señalado cuando esté la auditoría, que será "en corto plazo", se tomará la decisión pertinente.

Gómez ha pedido "menos ideología, y más eficiencia y eficacia", y ha instado a la ciudadanía a estar tranquila porque "se tome la decisión que se tome", desde la Conselleria se va a "velar por que la asistencia que se preste sea la que se tenga que prestar".

Fuga de sanitarios en Dénia

Por su parte, el comité de empresa del hospital de Dénia-Marina Salud ha denunciado "una aceleración de fuga de profesionales" en el Departamento ante "la indecisión" del conseller de Sanidad, Marciano Gómez, de finalizar la concesión con la concesionaria, a pesar de "las pésimas condiciones de trabajo que deben soportar diariamente" los facultativos médicos.

En un comunicado, el comité de empresa ha criticado que en el último año y medio "unos 280 profesionales de la plantilla de Marina Salud han abandonado el Departamento" y "sólo en septiembre han solicitado el cese al menos ocho enfermeras, un radiólogo, un psiquiatra, un oftalmólogo, un médico de Urgencias, un ginecólogo, un internista, una administrativa y dos TCAE".

"Ante esta situación, la respuesta que está dando la administración es ambigua, dilatando decisiones que ya se habían tomado previamente y que a los profesionales les hace pensar que la resolución va a ser distinta a la iniciada, siendo cuestión de tiempo que Sanidad prorrogue el contrato con la concesionaria Marina Salud", han incidido.

Asimismo, han sostenido que tienen conocimiento de que, "una vez más, Ribera Salud se niega a aportar la documentación solicitada en las normas de reversión, actualmente vigentes y aprobadas en Les Corts, con el principal objetivo de bloquear la finalización de contrato y el paso a una gestión directa por parte de la Conselleria de Sanidad".

Así, el Comité no entiende "cómo a pesar de tener un informe de la Abogacía de la Generalitat en contra de la compraventa de acciones de Ribera Salud, incumpliendo la Ley Valenciana de Salud, de la falta de lealtad en la entrega de documentación solicitada, y con el incumplimiento reiterado de los pliegos, Gómez todavía siga dudando si el 31 de enero finalizará o no la concesión".

Al respecto, han censurado que a través de esta concesionaria están "con una situación lamentable a nivel laboral y asistencial".

Por ello, han concluido criticando que Marina Salud "ignora el proceso de reversión iniciado, ofreciendo a cambio un plan estratégico lleno de promesas que deberían de haberse ejecutado con anterioridad, conforme marcaba el pliego de condiciones de la concesión".