“Las noches de la peste”: Orhan Pamuk, entre princesas, pandemias y revoluciones
★★★★
Por Toni Montesinos
El año pasado vimos cómo el alcalde de Estambul anunció su deseo de poder albergar en la ciudad los Juegos Olímpicos de 2036. La idea central del proyecto estaba clara: enlazar Oriente y Occidente, pues Estambul se pinta como el tradicional puente entre ambas civilizaciones durante milenios, hoy multicultural y moderno. Ese tópico ya parece inevitable en torno a la ciudad y es el mismo al que en cierto modo se ha dedicado Orhan Pamuk a lo largo de su carrera y que se hizo ostensible en su debut literario, «Cevdet Bey e hijos».
Esta era una historia muy convencional de la que renegó el propio autor y que seguía los pasos de una familia adinerada –como la del propio Pamuk, cuyo abuelo ingeniero fundó la fortuna de la que él se beneficiaría, recibiendo una educación laica de alto nivel– de modo costumbrista. Constituía todo un fresco destacado y entretenido de una sociedad que se estaba abriendo a ideas occidentales: democracia, revolución… en el contexto de una Turquía como joven república hasta llegar a los años 70. Pues bien, cuatro décadas más tarde incursiona en otra obra de tinte histórico, «Las noches de la peste» (traducción de Miguel Ángel Romero Junquera y Xavier Gaillard Pla), llevándonos a1901 y a una isla del Mediterráneo oriental, Minguer, a bordo de un barco donde viaja la princesa Pakize Sultan, sobrina del sultán Abdülhamit II, con su marido, el doctor Nuri.
Lo interesante es cómo el que fuera Premio Nobel en 2006 abre su texto de modo metaliterari o con una nota firmada por una mujer, y fechada en 2017, en la que alude a una investigación en relación con una epidemia y a unas cartas que cayeron en sus manos, justamente las que envió Pakize a su hermana mayor. A partir de ese juego literario, muy bien presentado, se levanta tanto una novela histórica como de misterio, pues también en ese trayecto marítimo hay un pasajero que va de incógnito y que en realidad es un inspector de sanidad del Imperio otomano. Su misión: corroborar que la peste ha alcanzado el continente. Una excusa para proporcionarnos una panorámica de las relaciones en esa isla otomana entre cristianos y musulmanes con todo lo previsible del género (personajes épicos, amores y traiciones), pero también con sus alicientes, cimentados en una serie de aventuras y crímenes.
▲ Lo mejor
Cómo crea una trama novelesca a raíz de una cuarentena y la inestabilidad política
▼ Lo peor
Pide un lector al que le atraiga el exotismo otomano y quiera entender la evolución de Turquía