Crítica de 'Los indeseados': Un thriller entre sombras ★★★

Falta poco para que en Islandia comience el sol de noche («es el mejor momento para invertir en unas buenas cortinas opacas», parlotea la radio). Lo que significa que desde finales de mayo hasta principios de agosto, brillará las 24 horas del día. Lo que no evita, sin embargo, que la película de Erlingur Thoroddsen resulte opresiva, oscura, un thriller de atmósfera irrespirable sin concesiones para el espectador. 

La historia arranca con el aparente suicido de la ex pareja de Óðinn, que debe rehacer su vida y, sobre todo, ayudar a la hija de ambos, una adolescente con problemas de acoso escolar y de ideas inquietantes. El tipo, que hace poco dejó de beber, de beber mucho, y trabaja en asuntos sociales, se obsesiona con las muertes de dos jóvenes ocurridas varias décadas atrás en un centro de menores regentado por un matrimonio retorcido y violento.

Así, a golpe de flash backs, conoceremos a los fallecidos, ambos enamoriscados de una chica acogida igualmente en el infernal caserío. Y cuando Óðinn profundiza en aquellos hechos espantosos empieza a sospechar que están de alguna forma relacionados con el trágico final de su propia mujer. 

Pasado y presente se funden, pues, en este sobrenatural filme con toques de noir escandinavo mientras una siniestra presencia a la que llaman Sombra envuelve a los personajes y se entrecruzan asuntos tan peliagudos como el de los embarazos no deseados o el alcoholismo. Hay varios giros del guion, pero el postrero los dejará helados. Sí, como a ellos.

Lo mejor: Se trata de un asfixiante y sobrenatural thriller con toques terroríficos.

Lo peor: Quizá la manera en que se funden las dos historias del filme resulta un tanto tramposa.