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Junot Díaz, de víctima a acosador

Tanto el escritor dominicano como el estadounidense David Foster Wallace, fallecido en 2008, toman protagonismo en los titulares por nuevos casos de supuestos abusos sexuales

Junot Díaz, protagonista de un nuevo caso de supuestos abusos sexuales
Junot Díaz, protagonista de un nuevo caso de supuestos abusos sexualeslarazon

Tanto el escritor dominicano como el estadounidense David Foster Wallace, fallecido en 2008, toman protagonismo en los titulares por nuevos casos de supuestos abusos sexuales.

Nuevas y no tan nuevas acusaciones de abusos. Las últimas contra Junot Díaz, ganador del Pulitzer, confrontado por una colega, Zinzi Clemmons, durante el festival de Escritores de Sidney. Se levantó ésta para cuestionar al autor de «La maravillosa vida breve de Óscar Wao» sobre los supuestos abusos a los que la sometió hace seis años. Después escribió en Twitter que «como estudiante de posgrado, invité a Junot Díaz a hablar en un taller sobre cuestiones de representación en la literatura. Era una desconocida de 26 años con los ojos muy abiertos, y él lo aprovechó para arrinconarme y besarme por la fuerza. No soy ni de lejos la única a la que se lo hizo, y me niego a guardar silencio. Le conté a varias personas la historia en ese momento y recibí correos electrónicos que él me envió después. Ocurrió y tengo registros».

Pocas horas más tarde otra escritora, Carmen María Machado, publicaba una larga parrafada en la que explica cómo, recién graduada, preguntó en un acto a Díaz por «la relación enfermiza y patológica de su protagonista [de ''Así es cómo la pierdes''] con las mujeres, y se fue a por mí durante 20 minutos». Según Machado, la respuesta de Díaz fue desproporcionada y violenta, aunque, para ser sinceros, tampoco explica en qué sentido. Sí que siguió discutiendo con ella y que, a su entender, la humilló. La escritora lamenta «cuán rápidamente se desvaneció su apariencia de progresismo y afabilidad; cuán fácilmente cayó en la intimidación y la misoginia en cuando cesaron por un segundo las interminables salvas de adoración y los piropos».

Trauma infantil

Todo llega después de que Díaz publicara en el «New Yorker» hace un par de semanas la historia de su propia violación cuando era un niño. En «El silencio: el legado de un trauma infantil» escribió que nunca recibió ayuda y que nunca se lo contó a nadie. «Esa violación», afirma, «no hay suficientes páginas en el mundo para describir lo que hizo conmigo (...) También las secuelas: la agonía, la amargura, la auto recriminación, el asco, la necesidad desesperada de mantenerlo oculto y en silencio. Jodió mi infancia. Me jodió toda la vida».

Poco después de abandonar el festival de Sidney, el escritor, a través de su agente, Nicole Aragi, enviaba un comunicado al «New York Times» para donde asumía la «responsabilidad» por su pasado. «Esa es la razón», dice, «por la que decidí contar la verdad sobre mi violación y sus efectos dañinos. Se trata de una conversación importante y debe continuar. Escucho y aprendo de las historias de las mujeres en este movimiento cultural esencial y pospuesto. Debemos continuar enseñando a todos los hombres sobre el consentimiento y los límites». El MIT, donde da clases, publicó un comunicado ayer para enfatizar que no tolerarán el acoso y que en todo momento animan a cualquier miembro de nuestra comunidad que haya experimentado o presenciado comportamientos de acoso a denunciarlos utilizando los recursos que ponemos a su disposición».

Entre tanto, otro escritor, David Foster Wallace, que se suicidó en 2008, volvía a los titulares luego de que la poeta y memorialista Marry Karr lo acusara de acosarla durante meses. La historia no es nueva, aparece reflejada incluso en la biografía de Wallace, obra de D. T. Max, pero según Karr no recibió toda la atención que merecía. Para Karr, que tuvo un fugaz romance con el atormentado y turbulento escritor en los noventa, «la violencia que me infligió como madre soltera fue ignorada por su biógrafo y el «New Yorker» como “ya conocida”». Eso sí, se niega a que nadie use su nombre y/o su historia para pedir la retirada de los libros de Wallace, «Nunca pediría a alguien que tire un libro, no en mi nombre». Hoy, 8 de mayo, sale a la venta el nuevo libro de Karr, un poemario titulado «Tropic of Squalor».