Roca Rey arrasa en Plaza México
El peruano abre la Puerta Grande y Joselito Adame cortó una oreja, con 25.000 personas en los tendidos
Creada:
Última actualización:
Con dos orejas para el peruano Andrés Roca Rey, una para el mexicano Joselito Adame y ninguna para el también mexicano Héctor Gutiérrez, finalizó este domingo la quinta corrida de la Feria de Aniversario 75-76 de la Plaza México. Los toros de La Estancia fueron escasos de trapío y mansos y al festejo acudieron unas 25.000 personas. El largo encierro culminó con la puerta grande para Roca Rey. El triunfador dejó como único argumento una buena tanda de naturales en su primer toro.
El peruano tuvo desde el principio muy a favor a gran parte de los asistentes al festejo. La buena entrada registrada se debió al elevado número de personas que acudieron a ver a la gran figura americana del momento. La faena del triunfo aconteció frente a un toro de feas hechuras y manso. Empezó Roca Rey con estatuarios, luego ejecutó una buena tanda por sitio y ligazón pero con la pierna contraria muy atrasada restándole profundidad. Una tanda de parecidas características la sucedió.
Con la mano izquierda llegó el mejor pasaje de la corrida, cuatro buenos pases ligados. Tras estos una fase final de poses y pases sin valor con el manso pidiendo sitio para irse. La estocada rubricó las dos orejas y los aplausos al toro, ambas cosas no merecedoras de dichos reconocimientos aunque parte del público protestó los premios otorgados.
Si a éste, un manso sin interés alguno en prender al de luces, Roca Rey le realizó desplantes de valor, a su segundo, un toro que sí entrañaba peligro, el más exigente de la corrida, Andrés no quiso ni verlo. Con los dos apéndices en el bolsillo optó por citarlo en paralelo por los dos pitones y con la tela atrasada. No hubo tiempo ni para desplantes tremendistas, para este que apretaba no lo había, lo pasaportó rápido. Para ello tuvo que recurrir al descabello tras pinchar. De nuevo aplausos para Roca Rey.
Tampoco hizo méritos Joselito Adame para obtener el apéndice que obtuvo. Se le vio sin sitio y agitado, pendiente de los comentarios de los tendidos. Realizó un quite de zapopinas imperfectas para luego asumir la responsabilidad del tercio de banderillas, sin aparentes razones para ello tras lo visto en sus tres ejecuciones carentes de la pausa que justifica esta suerte. Inició la faena de muleta de rodillas y al incorporarse siempre citó mal. Acabó con una demostración de valor que evidenciaba la falta de bravura del animal y provocó pitos. Estocada trasera, oreja sin petición mayoritaria y de nuevo desacuerdo de parte de los presentes por la decisión del palco.
El joven matador Héctor Gutiérrez decepcionó en su confirmación de la alternativa. Si bien arrancó firme con el que abrió plaza y realizó una buena tanda ligada por sitio y cadencia al que cerraba el encierro le metió la muleta citando cruzado, lo cierto es que ambas faenas se le hicieron muy largas y mostró no tener las cosas claras sobre el tipo de torero que es.
Los toros de La Estancia fueron muy mansos. Primero, segundo y tercero, de embestida agónica, inmerecidamente aplaudidos al arrastre. El subalterno Luis Alcántara tuvo su segunda importante actuación de la feria, destacando el par de banderillas al que partió plaza.