Fue compañero de Cristiano y Bale y ahora es millonario vendiendo relojes

Ramon Calliste era una de las grandes esperanzas de Gales, uno de los futbolistas llamados a tener una importante carrera en el Manchester United. Sus sobresalientes actuaciones en las categorías inferiores llamaron la atención de Sir Alex Ferguson, entonces entrenador del United, y Calliste pasó a ejercitarse con regularidad con el primer equipo.

En aquellas prácticas compartió vestuario con Cristiano Ronaldo o Wayne Rooney. “No siempre entrenamos con el primer equipo. Aspiraba a entrenar con ellos de forma permanente y fue increíble cuando tuve la oportunidad. Entrené con Rooney y Ronaldo, lo cual fue muy importante”, declaró al diario The Sun.

Apodado el nuevo Giggs, Calliste decidió dar un giro a su carrera y abandonó el United para fichar por su máximo rival, el Liverpool. Sin embargo, allí no pasó del equipo de reservas y el entonces seleccionador galés, John Toshack, le animó a buscarse un club en el que pudiera jugar con regularidad para poder ser convocado por Gales.

En la selección galesa coincidió en categoría juvenil con Gareth Bale: “Recuerdo haber visto a Balecuando tuvimos una sesión de entrenamiento de Gales sub-21 en el campo de Wrexham. Realmente no sabía quién era en ese momento, pero sabía que estaba en el Southampton. Pero después del entrenamiento estábamos rematando a portería y pude verlo practicando tiros libres. Desde ese momento se podía ver que era un jugador especial. Fue genial jugar junto a él y otros grandes jugadores del mundo”.

El siguiente destino de Calliste fue el Scunthorpe United y allí su vida cambió para siempre. En 2006 sufrió una grave lesión de ligamentos en un tobillo de la que nunca se recuperó y que terminó obligándole a dejar el fútbol. Solo tenía 24 años cuando se retiró y los relojes de lujo pasaron a ocupar el espacio que antes correspondió a la pelota.

“Empecé a involucrarme en la relojería a través de los contactos que tenía en el mundo del fútbol. Una vez que vi que podía convertirse en un negocio viable, creé Global Watches en 2013 y se ha convertido en una empresa realmente fuerte que ahora está facturando millones”, explicó Calliste.

Esta empresa que vende relojes de alta gama le permite ganar más de cinco millones de euros al año a Calliste, quien tiene claro cuáles serán los siguientes pasos a seguir: “La idea es seguir creciendo y, con suerte, vender la empresa dentro de cinco o diez años, tal como lo hizo Watchfinder recientemente”.

“Cuando se trata de productos de alto valor, hay que tener en cuenta muchas normativas. Hacemos todo según las reglas y es muy importante tener claro lo que estás haciendo. Tuve suerte de que fuera muy lucrativo desde el principio. Algunos relojes que vendemos pueden costar casi 300.000 euros”, añadió.

“Trataba con futbolistas al principio, vendiéndoles relojes y ya tenía esa confianza allí. Incluso hoy, los clientes se conectan y ven que soy yo y se sienten cómodos comprándome. Puede que haya otras empresas que sean más fuertes que la mía, pero como jugué el fútbol, eso ayuda al negocio. Tenemos un servicio a medida en el que nos dirigimos a los clientes, y no solo a los futbolistas”, continuó explicando Calliste, quien mantiene su conexión con el fútbol a través de su lucrativo negocio de lujo: “Cuando puedes llevar tu inventario a una sala de futbolistas, en donde quizá hay diez millonarios, eso es mejor para todos los involucrados. Prefieren ese servicio y es una oportunidad más fácil de vender productos. Tengo una gran relación con los jugadores y me aseguro de que estén bien cuidados”.