Combates profesionales

Las peleas de almohadas ya son un deporte oficial, así transcurrió su primer torneo

Luchadores profesionales de UFC y MMA de todo el mundo se dieron cita, a finales de enero, para participar en el primer Campeonato de Lucha de Almohadas, celebrado en Miami, y alzarse con el título de mejor guerrero y un premio en metálico de 5.000 dólares americanos

Luchadores profesionales de almohadas el mes pasado en Brasil
Luchadores profesionales de almohadas el mes pasado en BrasilLa Razón

El primer Campeonato de Lucha de Almohadas (PFC, por sus siglas en inglés), tuvo lugar en las afueras de Miami durante el último fin de semana de enero. Y en él, se concentraron una gran cantidad de luchadores de Ultimate Fighting Championship (UFC) que buscaron alzarse con el título de mejor guerrero y un premio en metálico de 5.000 dólares americanos. 16 hombres y 8 mujeres han participado en la primera edición de este novedoso deporte.

No obstante, aunque Marcus Brimage y Markus Perez partían como favoritos de cara al torneo ya que ambos tenían experiencia previa en combates de UFC, ninguno de ellos se llevó el cinturón de campeón. El premio fue para el luchador americano de artes marciales mixtas (MMA), Hauley Tillman. Por otro lado, el galardón femenino fue para la profesional brasileña Istela Nunes, quien se convirtió en la Campeona Femenina inaugural del PFC tras derrotar a la estadounidenseKendahl Voelker.

Cada combate consta de tres rondas de dos minutos en las que los luchadores se enfrentan con almohadas aprobadas por los organizadores del evento rellenas de espuma y cubiertas de una lona de nailon. Por otro lado, dado que es mucho menos probable que se produzca un K.O. (Knock Out), el ganador se decide por el número de golpes acertados y el daño provocado durante el transcurso de la pelea. Asimismo, el contacto con alguna parte del cuerpo está totalmente prohibido y, en caso de que alguna de las almohadas reglamentarias se escape de las manos de los combatientes, se parará la pelea del mismo modo que en un combate de boxeo, hasta que ambos “gladiadores” estén en igualdad de condiciones y puedan seguir luchando.

Tamara Keith, de la cadena de noticias estadounidense “NPR”, señaló que: “Tiene toda la estrategia y la intensidad del boxeo o las artes marciales mixtas con impactos más satisfactorios y lesiones menos espantosas”, lo que podría convertirse en una alternativa para aquellos que disfrutan de un buen combate y, sin embargo, no pueden soportar la violencia típica de los deportes de contacto. El CEO del PFC, Steve Williams, estuvo de acuerdo. “A los boxeadores no les gusta lastimarse, y hay mucha gente que no quiere ver la sangre”, explicó Williams, a lo que agregó: “Quieren ver una buena competencia, sin ver demasiada violencia”.

“Toda mi vida he estado en las artes marciales, y les puedo decir que esto será más grande que todas ellas”, comenta Yuri Villefort, un luchador brasileño de MMA que dirige la escuela “Indio Dojo” en Boca Ratón, uno de los primeros gimnasios que se asociaron con Williams. “Cualquiera puede competir y cualquiera puede ganar. No importa tu tamaño, edad o procedencia”.

Por último, todos hemos participado alguna vez en una pelea de almohadas cuando éramos niños, aunque, ahora que ha sido profesionalizado, quién sabe si algún día veremos a este deporte en unos Juegos Olímpicos.