Golf

Jon Rahm, que hasta tuvo que golpear una bola de espaldas (vídeo), peleará por el US Open el último día

El español pudo acabar líder la tercera jornada, pero un doble bogey en el hoyo 18 se lo impidió. Fue un día infernal por el viento

Jon Rahm, durante la tercera jornada del US Open de golf
Jon Rahm, durante la tercera jornada del US Open de golfERIK S. LESSERAgencia EFE

El día fue infernal. Demasiado viento que hizo que en un momento del hoyo 13 Jon Rahm gritara: “Demonios. Menudo día”. Ni un matemático podía hacer cálculos y el campo de Brookline, The Country Club, fue ganando a casi todos los golfistas, también al español, al defensor del título que, pese a todo, tuvo la posibilidad de acabar primero en solitario y un doble bogey en el último hoyo se lo impidió. De todas formas, afronta el cuarto día con todas las opciones de retener su corona. En esa tercera vuelta, Jon vivió una montaña rusa, como casi todos. Hizo 71 golpes, uno por encima del par, para un total de -3 (207), a un solo impacto de los líderes, Zalatoris y Fitzpatrick.

Fue tal la locura, que en el hoyo 8 Rahm tuvo que recurrir a la improvisación para salvar una situación complicada. Se le quedó una bola pegada a un árbol y probó todas las maneras de golpearla: por detrás del tronco, como si fuera zurdo... Pero no, había que sacarla de ahí de espaldas, y así lo hizo. En ese hoyo sumó uno de los tres bogeys del día, más el doble final. Muy peligroso parecía el del hoyo 13, que apuntaba también a doble bogey, pero lo recuperó como pudo. Sobrevivir era la palabra, y lo hizo con un buen putt. Estuvo muy fino el español en los de media distancia. Pasado ese susto llegó el mejor momento del vasco. Un birdie en el 14, otro en el 15 con un putt lejano espectacular y otro en el 17, que le situaba líder con un esprint final fantástico. Pero había que acabar y llegó el bajón en el 18: el primer tiro al bunker; el segundo, el drama, porque no logró sacarla de ahí; el tercero de bunker a bunker, y con la bola clavada, y el resultado, esos dos golpes por encima del par del hoyo que le dejaron un ligero sabor amargo, aunque las opciones siguen intactas.

Era tan imposible el día que cualquier pérdida de concentración podía ser letal. Le pasó al número uno del mundo, Scottie Scheffler, que empezó lanzado, incluido un eagle en el 8, pero en el 11 hizo un doble bogey, pasándose de largo primero por una lado, después por el otro, desesperado, y terminó tan tocado que en los tres hoyos siguientes también hizo un golpe más del par y se fue hundiendo. No lo hizo del todo, por lo que el domingo puede pelear, pues está justo detrás de Rahm, con -2. Todavía más duro fue el día para el estadounidense Morikawa, que había empezado como líder y firmó un +7 de parcial para un +2 que le deja sin opciones.

Sólo siete jugadores acabaron el día por debajo del par. Dos de ellos, los líderes. Zalatoris, que busca su primer título, hizo 67; y Fitzpatrick, 68.

Clasificación:

1. W. Zalatoris (EE UU): 206 golpes (-4)

-. M. Fitzpatrick (Ing): 206 golpes (-4)

3. Jon Rahm (Esp): 207 golpes (-3)

4. K. Bradley (EE UU): 208 golpes (-2)

-. A. Hadwin (Can): 208 golpes (-2)

-. S. Scheffler (EE UU): 208 golpes (-2)

7. S. Burns (EE UU): 209 golpes (-1)

-. R. McIlroy (Irl): 209 golpes (-1)

-. J. Dahmen (EE UU): 209 golpes (-1)

10. N. Hardy (EE UU): 210 golpes (par)