Baloncesto
El nuevo Luka Doncic
Su renovación y su nuevo aspecto físico suponen el comienzo de una nueva era para el jugador balcánico y para Los Angeles Lakers
Luka Doncic es el nuevo capo de Los Angeles Lakers y su renovación por tres años a cambio de 165 millones de dólares es, en realidad, un paso más de una operación calificada como un "momento monumental" para la franquicia californiana. Su nuevo aspecto físico, mucho más definido y delgado que cuando recaló en febrero en L.A., es la guinda de un movimiento que redefine la carrera del balcánico y el presente de los Lakers.
Rob Pelinka, presidente de operaciones de baloncesto y mánager general de los Lakers, aseguró en un comunicado que se trata de "un momento monumental" para el equipo californiano. "Luka es uno de los jugadores más trascendentales del juego actual y su dominio en la cancha y su pasión no tienen comparación. Desde el momento en que Luka se convirtió en jugador de los Lakers, hubo una conexión inmediata y una admiración mutua. Luka liderará a nuestra franquicia en la búsqueda de futuros campeonatos, un objetivo que definirá para siempre a los Lakers", fue lo que soltó Rob Pelinka, presidente de operaciones y manager general laker, después de la firma del nuevo contrato.
En ese acto, el indiscutible protagonismo de Doncic estuvo aderezado de detalles. Lo primero fue la ausencia de LeBron James, de vacaciones en barco por el Mediterráneo. Sí asistieron media plantilla del equipo y el entrenador, JJ Redick. Entre los presentes estaban varios de los refuerzos que han llegado con la aquiescencia del esloveno. Allí se encontraban el que será pívot titular, DeAndré Ayton, el alero Jake LaRavia y el especialista defensivo Marcus Smart. Y no serán los últimos fichajes del equipo. "Quiero añadir un título más a esta franquicia como muchos, muchísimos jugadores que pasaron por aquí y en eso estamos trabajando", dijo Doncic. "Sinceramente, creo que tenemos un gran equipo, tenemos lo necesario para competir por un campeonato. Daré lo mejor de mí para intentar ganar todos los partidos, pase lo que pase. Tenemos jugadores nuevos y geniales en el equipo. Vamos a ir a por todas", añadió.
Las condiciones económicas no son las que habría tenido en caso de haber seguido en Dallas. Los Mavericks le podían haber llegado a ofrecer 73 millones de dólares por temporada. Con los 55 anuales que percibirá está en el "top 15" de la Liga. Y en sus diez primeros años en Estados Unidos se habrá embolsado unos 364 millones de dólares. Pero es que la letra pequeña deja esa cifra en ridículo: Doncic cuenta con la denonimada "player-option" según la cual en 2028 -con 29 años- podría renovar con los Lakers para percibir 417 millones de dólares más hasta 2033. Así que resulta más que comprensible el guiño filantrópico que lanzó Doncic cuando firmó la ampliación de contrato: donará cinco millones de dólares a 77 -guiño a su número- jóvenes deportistas para que persigan sus sueños.
La firma del contrato llegó después de una gira por Nueva York y Chicago para presentar sus nuevas zapatillas de la marca Jordan Brand, una filial de Nike que le paga por diez años de contrato 150 millones de dólares. Y en esa gira se pudo ver la nueva presencia física de Doncic, que fue portada de la edición estadounidense de "Men's Health".
Luka ha trabajado semanas con un equipo en el que están su entrenador personal, Anže Maček, el fisioterapeuta Javier Barrio y la nutricionista Lucía Almendros. Su nueva imagen es impactante. Nada que ver con los 122 kilos que llegó a pesar a principios de la temporada pasada, según informó la ESPN. ¿Las claves? Los entrenamientos matinales, la primera sesión de trabajo, la realiza en ayunas. Se trata de un ayuno intermitente de 16 horas diarias que abarca desde las 20:30 hasta las 12:30 del día siguiente. Además del ayuno, su dieta incluye comidas altas en proteínas, la mínima cantidad posible de azúcares y nada de gluten. El objetivo no es sólo la pérdida de peso. También se busca reducir la inflamación que los entrenamientos podían producir en su cuerpo. Y esto lo cumple de forma severa durante seis días a la semana con entrenamientos dobles diarios. "Simplemente creo que necesitaba un nuevo comienzo después de todo lo que pasó", afirma. "Si me detengo ahora habrá sido en vano. Cada verano me esfuerzo al máximo para trabajar en diferentes cosas. Soy muy competitivo y este verano está siendo un poco diferente. Me motivó a ser aún mejor. Era un ahora o nunca", apunta. "No todo es saltar alto. Creo que soy muy atlético en otras cosas: en el equilibrio, en el control del cuerpo, en lo que hago al frenar, en la desaceleración", concluye Doncic.
Y ese nuevo Doncic se verá en pista el viernes en un amistoso de su selección con Alemania. Luego llegará el Eurobasket donde podría encontrarse con España en octavos si Eslovenia acaba segunda de su grupo la primera fase y España tercera, pero esa es otra historia.