Euroliga

El "Chacho", Tavares, la zona... los argumentos del Madrid para superar al Partizán

El equipo de Chus Mateo busca la Final Four, donde espera el Barça, después de los dos heroicos triunfos en Belgrado

Sergio Rodríguez, en uno de los partidos que ganó el Madrid en Belgrado
Sergio Rodríguez, en uno de los partidos que ganó el Madrid en BelgradoANDREJ CUKICAgencia EFE

Sergio Rodríguez, Ana Bernal y sus tres hijos, Carmela, Greta y Sergio, volvieron a casa el verano pasado. El «Chacho», con 36 años, y su familia regresaron a Madrid después de siete cursos en los que el base pasó por los Sixers, el CSKA y el Olimpia de Milán. Vivió su última aventura NBA, ganó una Euroliga con los moscovitas y sumó todos los títulos posibles en Italia. Tras recibir la llamada del Madrid ni se lo pensó. Con un contrato por una temporada con opción de una más, si el club lo estima conveniente, el año del base tinerfeño no ha sido sencillo... hasta el momento más crítico de la temporada en que se ha convertido en un jugador imprescindible.

«La entrada del Chacho ha sido muy importante para el equipo porque empezó a gritar como un veterano de verdad, hay que escuchar más a gente así por su voz y su experiencia. Primero me levantó a mí y luego a todo el equipo. Exactamente me dijo que si yo agachaba la cabeza, me la iba a levantar. Y nos ha levantado a todos», confesaba su compañero Mario Hezonja después del tercer partido de la serie ante el Partizán en Belgrado. Su importancia en el desenlace de ese encuentro fue mucho más allá de los números. Hizo entender a dos compañeros como Hezonja y Musa que el juego se trata de bastante más que de anotar 20 puntos cada noche. En el cuarto partido fue protagonista también en su hoja de servicios. Anotó cinco puntos y dio varias asistencias cuando los serbios amenazaban con la remontada en el tercer cuarto. Acabó el partido con 8 puntos, sin fallos en el tiro, 7 asistencias, 2 rebotes y sintiéndose más importante de lo que había sido en toda la temporada. De estar apenas 8 minutos de promedio en pista en los dos primeros partidos, rozó los 20 en los dos en Belgrado.

El curso no ha sido bueno para él hasta ahora. Su calidad le ha bastado para manejarse con solvencia en partidos poco comprometidos en la Liga Endesa, pero ante rivales de nivel el panorama cambiaba. Sus carencias defensivas han sido explotadas por equipos como el Barcelona, el Partizán de los dos primeros partidos o el Baskonia. Aquí es también donde ha aparecido otro de los factores que ha ayudado a cambiar la eliminatoria ante los balcánicos: la defensa zonal 2-3 de toda la vida ideada por Chus Mateo. Esa disposición atrás ha permitido disimular las carencias entre otros del Chacho y ha complicado sobremanera los ataques del equipo que entrena Zeljko Obradovic.

«La clave en el quinto partido va a ser la energía. Tenemos que tener la misma que tuvimos en el principio del cuarto partido en Belgrado. Habrá momentos duros, pero tenemos que estar preparados. Llevamos trabajando para esto desde el principio de la temporada y queremos aprovechar la ventaja del factor campo», asegura el «Chacho».

Para ello volverá a ser necesaria la omnipresencia de Tavares. Nadie en el vestuario, ni sus propios compañeros, esperaba un rendimiento tan brutal del pívot en el Stark Arena debido a las molestias en la rodilla izquierda: 20,5 puntos de media, 9 rebotes, 2,5 tapones y 35,5 de valoración.

En el quinto partido todavía hay más factores que pueden ser determinantes. En el Madrid será baja Gaby Deck por la rotura en el ligamento colateral interno que sufrió en el último cuarto del cuarto choque. Y en el Partizán reaparecerá Kevin Punter. El escolta estadounidense fue el jugador más determinante de los serbios en los dos primeros capítulos. El estreno de la serie lo resolvió con un triple y en el WiZink promedió 20 puntos, 2 rebotes y 4,5 asistencias. Su presencia es vital para los balcánicos en el ataque estático y es la principal arma que tienen ante la defensa zonal del Madrid. «Perdimos los dos partidos de casa, pero todavía podemos hacer algo grande. Suena dramático, pero es como si no hubiera jugado baloncesto en una eternidad. Es genial estar de nuevo con el equipo y poder ayudar en la pista el miércoles», asegura.

La locura que ha sido la eliminatoria queda reflejada en que ningún equipo ha sido capaz de ganar hasta ahora en su cancha. Y eso que de las 80 series de cuartos de final disputadas en la historia de la Euroliga, 67 las ganó el equipo que tenía ventaja de campo, nadie remontó un 2-0 y de los 15 partidos que se han jugado estos playoffs solo ha habido cinco victorias locales.

Cuartos de final

A. Olympiacos, 2-Fenerbahçe, 2

(79-68; 78-82; 71-72; 73-69 y )

B. Mónaco, 2-Maccabi, 2

(67-79; 86-74; 78-83; 104-69 y día 10, 20:00)

C. Barcelona, 3-Zalgiris, 0

(91-69; 89-81 y 66-77)

D. Real Madrid, 2-Partizán, 2

(87-89; 80-95; 80-82; 78-85 y día 10, 21:00)

Final Four Kaunas (19-21 mayo)

Semifinales: ganador A-B y Barcelona-D. (Todo en Dazn).