Tour

Los dos caminos de Enric Mas en el Tour de Francia

Decimotercero a seis minutos, el jefe de filas del Movistar debe decidir si deja la general y busca victorias de etapa en esta segunda parte de la ronda francesa 2025

(France), 14/07/2025.- Spanish rider Enric Mas of Movistar Team in action during the 10th stage of the Tour de France cycling race over 165.3km from Ennezat to Le Mont Dore Puy de Sancy, France, 14 July 2025. (Ciclismo, Francia) EFE/EPA/Christophe Petit Tesson
Enric Mas entra en meta en la etapa décima del Tour 2025Christophe Petit TessonAgencia EFE

Pasado ya medio Tour de Francia, la carrera todavía no ha tenido ninguna etapa de alta montaña. De esas de puertos largos que acumulan mucha fatiga en las piernas. Sin embargo, Enric Mas ya se encuentra a casi seis minutos en la clasificación general. El mallorquín es la baza del Movistar Team de cara a lograr un puesto de honor, pero tras diez etapas está lejos de los más fuertes.

Y eso marca, sobre todo para alguien de quien, hace ya como siete años, Alberto Contador dijo que era lo más parecido a él, y que tenía potencial para ser un hombre-Tour. El paso del tiempo y la irrupción de fuerzas de la naturaleza como Pogacar o Evenepoel lo han dejado en un segundo plano en ese sentido, pero tanto él como su entorno insisten año tras año en pelear por estar entre los mejores de la general.

Uno de los minutos lo perdió al verse afectado –por suerte sin daños– por la caída que mandó a casa a Almeida y Dunbar camino del Mur de Bretagne. Más preocupantes fueron los tres minutos que se dejó en la crono o, por ejemplo, los 49 segundos que le cayeron en el Mont-Doré, en la primera etapa montañosa de la carrera. Cierto que no es la montaña que él asimila mejor. Se quedó al coronar el penúltimo puerto, cuando los Visma metieron cuneta con el viento. Ya no logró entrar en el grupo, y empezó la subida final cortado.

Con estos mimbres, se vuelve a abrir un debate que lleva ya varios años rondando el autobús del equipo Movistar. ¿Debería Mas dejar pasar la clasificación general y dedicarse a buscar victorias de etapa a través de fugas? De momento, el plan y las órdenes del equipo eran claras: todos al lado de Enric, salvo los encargados de entrar en fugas. El lunes fueron Pablo Castrillo e Iván Romeo.

Lo más arriba posible

En todas sus declaraciones públicas desde que empezó la carrera, además, Enric siempre ha dicho que el plan es el mismo. Terminar lo más arriba posible en París, buscando acercarse al podio. Sin embargo, a día de hoy ese objetivo parece inviable. O tal vez se pueda aproximar a él entrando en escapadas de calidad que logren llegar con tiempo a meta. El caso es que la historia de Mas con el Tour parece repetirse año tras año.

Hipotecar buena parte de la temporada por la ronda francesa, pese a que su balance en la misma tiende a ser descendente.

Teniendo en cuenta que este miércoles el Tour tiene una etapa más o menos llana hasta Toulouse, todo apunta a que Hautacam será el último día para evaluar las opciones del corredor de Artà, que suele ofrecer una versión mucho más desenfadada y espectacular cuando se sacude esa presión de terminar arriba en la general. Si en la primera jornada pirenaica de mañana jueves está con los más fuertes, es posible que insista en hacer la general para acabar lo más arriba posible. Algo que, tampoco conviene olvidarlo, tiene un premio en forma de puntos UCI en un año decisivo, pues el trienio que marca los descensos acaba ya este mes de noviembre.

En cambio, si sigue retrocediendo, tras la cronoescalada de Peyragudes debería dar paso a esa otra vertiente. Su última semana del Tour del año pasado le reconcilió con parte de la afición, normalmente crítica con él por entender que corre de forma conservadora y eso acaba incluso mermando sus resultados. Algunos han llegado a poner en duda incluso su calidad como ciclista, algo que con cuatro podios en la Vuelta a España debería estar fuera de debate.

Decimotercero y a casi seis minutos. Hautacam en el horizonte. Todo ciclista sueña con pelear la clasificación general de un Tour de Francia. Pero, a veces, en el camino se pueden perder muchas cosas igualmente atractivas y que dejan más huella en el aficionado. En esa bifurcación de caminos se encuentra Enric Mas. Y en breve le va a tocar decidir.