Desde Arabia Saudí
Cris Lazarraga, piloto del equipo de Nadal en la F1 acuática que arranca este viernes: "El futuro sostenible del motor ya está aquí"
La subcampeona mundial de motos de agua compite desde este viernes en el primer campeonato que permite disfrutar de la "adrenalina del motor sin dañar el medio ambiente"
Cristina Lazarraga (Madrid, 1993) es conocida como la primera española en ser subcampeona del mundo de motos de agua, así como por ser campeona europea en la competición deportiva conocida como jetcross.
La historia de una madrileña que, como la mayoría "somos nómadas porque no tenemos mar", pasaba los veranos en Alicante y hasta llegó a vivir allí un breve periodo cuando tenía tres años. El subirse a una moto de agua le vino desu padre, que desde muy joven competía en motocross y al que un día le dejaron probar una moto acuática en el Pantano de San Juan, "cuando aún se podía", y nunca se volvió a bajar.
Su padre, quién sabe si con intención o no, le contagió su pasión por las motos y el agua llevándosela consigo desde pequeña a cada carrera. "Siempre estuve metida en el mundillo y quise continuar", explica en conversación desde Arabia Saudí con LA RAZÓN.
Así comenzó. Logró con los años ser mejor y un día de 2021 hizo historia coronándose en el primer mundial de motos de agua femenino celebrado en la isla italiana de Cerdeña. "No pensé nunca que lo haría, pero soy muy insistente con mis objetivos yal tiempo que iba viendo que se me iba dando bien, iba subiendo las expectativas".
Cuando consideró que había cumplido con sus objetivos y teniendo claro que 2021 sería su último año subida a una moto acuática como profesional, sufrió un grave accidente en una carrera que le dejó ocho costillas rotas y un neumotórax en el pulmón. Tras siete meses de recuperación, precisamente cuando pudo volver, le surgió la oportunidad de presentar su candidatura como piloto de la E1, la Fórmula 1 de lanchas eléctricas, en aquel entonces aún proyecto. Ahora, casi dos años después, arranca este viernes en Arabía Saudí con la primera de las ocho carreras por todo el planeta, en las que se decidirá quién de los también ocho equipos gana el campeonato.
"Me escogieron tras diez días en la academia y empecé a hacer entrevistas con distintos equipos a los que le interesaba", recuerda la deportista. Ella tenía claro que acabaría recalando en uno en concreto: el que dirigía su referente de toda la vida e ídolo personal que, además de español, siempre suma puntos. Nada más y nada menos que Rafa Nadal. "Ahora es mi jefe", dice entre risas, como si aún no fuera parte de su día a día en el que él está activamente implicado como dueño del 'Team Nadal'.
El resto de equipos tienen al frente también a personalidades deportivas como el piloto Checo Pérez; el campeón de la Superbowl Tom Brady; el ya retirado futbolista Didier Drogba; el dj Steve Aoki, o el cantante Marc Anthony.
Todas las 'escuderías' están formadas por dos pilotos, siempre una mujer y un hombre, que compiten uno por otro en las distintas pruebas. Los dos deben, además, ser los más rápidos para sumar buenos tiempos que se traduzcan en puntos y tener posibilidades de alzarse con el triunfo. A Cristina le acompaña el campeón del mundo de barcos a motor F-4 y de karts, el francés Tom Chiappe. Y a ambos, su padre, el tres veces campeón también de barcos motorizados, Philippe Chiappe, como su radio man, "tus ojos fuera del agua al ser la visibilidad reducida dentro de la lancha; es el que te indica, por ejemplo, cuando puedes adelantar, porque no solo es conducción, también es estrategia".
Los últimos 20 días Cristina ha estado inmersa en entrenamientos en territorio saudí para acabar de machacar el manejo de las lanchas y la dinámica de la competición. También una retransmisión por televisión y en línea que Lazarraga califica de "locura" en el sentido más positivo del término ya que las lanchas incorporan una cámara de 360 grados.
Según cree, la escogieron en el equipo de Rafa Nadal por su experiencia en la competición deportiva y capacidad para aportar habilidades en un terreno tan particular como es el agua. En el sí de ella a asumir el reto también pesó que la competición, el formato y los barcos fueran completamente inéditos y distintos a todo lo que se ha visto hasta ahora, empezando por la regla paritaria que lo atraviesa y la obsesión sostenible con la que nace el campeonato.
En definitiva, en palabras de nuestra representante española, Cristina Lazarraga, la E1 Series, que este viernes y sábado echa a andar con los ojos de todo el mundo puestos en la ciudad de Jeddah, es una línea de competición igualitaria y sostenible que es hoy una realidad gracias a la innovación tecnológica.
"Está planteada para hacer disfrutar de la adrenalina del motor tanto a los que compiten como a los que la ven, pero sin dañar el medio ambiente. Un proyecto de un futuro que ya está aquí", acaba diciendo a este diario antes de tener que colgar porque tiene que volver a tomar los mandos de su lancha.
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