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El Bernabéu se llena para la presentación de Hazard con el Real Madrid

El Bernabéu se llena para la presentación de Hazard con el Real Madrid
El Bernabéu se llena para la presentación de Hazard con el Real Madridlarazon

¿Tú crees que me firmará?», le decía a unas calles del Bernabéu Miguel (8 años) a su padre. Llevaba una camiseta del Chelsea con el nombre y el número de Hazard y una gorra del Real Madrid. Está nervioso porque el ídolo al que veía por la tele y marcaba goles para otro equipo se va a presentar oficialmente en el Santiago Bernabéu. El padre de Miguel tenía razón en lo de que sería muy difícil pedirle un autógrafo a la nueva estrella blanca, porque efectivamente, había mucha gente. Las colas para entrar al estadio daban la vuelta completa a la fachada cuando quedaba una hora para la presentación, que no comenzó hasta que la grada se llenó hasta el tercer anfiteatro. 50.000 personas reunidas para ver de cerca el primer día de Hazard con el Real Madrid, una puesta de largo especial, nada que ver con la de Jovic unas horas antes. Del antepalco habitual se pasó al palco de honor, porque el futbolista que llegaba no es como los demás. Se trata del líder indiscutible del nuevo proyecto de Zidane, un jugador con potencial de Balón de Oro, algo que él reconoce tener en la cabeza aunque no piense en ello.

Hazard empezó en español, dando las buenas tardes para luego pasar al francés para sentirse más cómodo. Estaba cumpliendo el sueño que tenía desde pequeño, cuando jugaba en categoría benjamín con sus hermanos. Entonces ya cantaba los goles el Real Madrid, el equipo que ayer le recibía con la emoción de los días que cambian la historia de una institución. Hace diez años llegó Cristiano y también llenó el estadio, porque había una ilusión en que con él las cosas irían bien. Lo mismo sucedió este jueves 13 de junio con Eden Hazard, que llegó sonriente, tranquilo y acompañado por toda su familia. Su madre se emocionó cuando el público empezó a corear su nombre, seguramente pensando en todo lo que habían sacrificado para que sus hijos llegasen a lo más alto. El nuevo ídolo del madridismo se vistió de corto, se puso la camiseta blanca, se hizo un selfie, besó el escudo y repartió cientos de balones. Los lanzaba con las dos piernas, porque es difícil saber si es diestro o zurdo. Pega a la pelota con las dos y regatea también por los dos perfiles, un demonio para las defensas. Eso al menos espera Zidane, el ídolo de juventud del Hazard y un hombre clave para su llegada a Chamartín. «Seguro que él ha sido un factor importante. Se trata de alguien muy importante para este club y yo espero seguir su camino», admitía Eden, con el que Florentino sólo se reunió una vez. Fue en Londres, en una gala de entrega de premios. Confiesa que hablaron muy tranquilamente y se dijeron que había llegado la hora de fichar por el Real Madrid.

Un fichaje que no le llega tarde. Todo lo contrario. «Tengo 28 años, la mejor parte de la carrera de un futbolista, así que creo que es el momento justo», añadía con soltura ante la prensa. Nada más sentarse ante el micrófono se dispararon cientos de ráfagas de las cámaras de los fotógrafos, algo que no le perturbó. Lo primero que hizo fue bromear con sus hermanos, que estaban en la primera fila. «Si tenéis alguna pregunta, adelante», les comentó con una pequeña sonrisa. Eden estaba por fin donde quería estar después de liderar al Chelsea y a Bélgica. Le preguntaron si se sentía un galáctico y su respuesta fue que «todavía no». «Espero poder serlo algún día. Por ahora sólo estoy centrado en ayudar a ganar partidos y los títulos. Lo demás vendrá solo». Con Courtois ya ha hablado de lo que supone entrar en el Madrid, y Kovacic le ha servido de interlocutor con Modric. «Le he pedido que me deje el 10, y me ha dicho que no». Lo mismo cree que le va a pasar con los penaltis: «Los tira muy bien el capitán».

Durante la tarde, el público se acordó de Mbappé, un fichaje que el club no descarta.