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El Real Madrid olvida la lección contra el Brujas (2-2)

Sergio Ramos marcó de cabeza el primer gol del Real Madrid
Sergio Ramos marcó de cabeza el primer gol del Real Madridlarazon

Ni intensidad ni concentración ni firmeza defensiva. Todo lo que había aprendido el Real Madrid en sus últimos tres encuentros lo olvidó de un plumazo contra el Brujas, el equipo belga que se plantó en el Bernabéu sin miedo ni complejos y devolvió al conjunto de Zidane al diván de las cosas sin hacer, de los deberes que no se han hecho o de las lecciones que se aprendieron rápido, pero se olvidaron igual de rápido.

El Real Madrid va a llegar al tercer encuentro de la Champions con un punto gracias a una segunda parte en la que sacó la garra habitual de los momentos de urgencias y a base de cabezazos empató el partido. Y pudo llevárselo en un arrebatado final, ése en el que encierra al rival y éste no sabe ni por dónde vienen. Pero no sucedió. El carácter no fue capaz de superar los despistes propios con los que el conjunto de Zidane casi se tira al barranco en la primera mitad del partido.Quizá el nombre del rival no invitaba al esfuerzo colectivo en defensa, pero eso es lo que le ha permitido al Real Madrid liderar la Liga y recuperar cierta confianza.

El choque contra el Brujas tenía que ser la confirmación de ese nuevo equipo, con mucho trabajo, a la espera de que vaya apareciendo el talento. Sin embargo fue un parón en ese crecimiento de los últimos duelos. No es capaz este grupo de jugadores de encontrar la regularidad y no está muy claro por dónde va a salir cada vez que el árbitro pita el comienzo.

El Brujas llegó al Bernabéu sin engañar a nadie. «A la contra», habían dicho en las conferencias de prensa y a la contra fueron, con todo su alma y el cuchillo entre los dientes. Fue una tortura para toda la defensa. Nacho pasó un calvario. No salió en la segunda mitad, lesionado. Es un jugador que se sacrifica y que lo intenta, pero cada vez se ve más superado. Sufrió, como también Ramos o Varane. Los delanteros rivales eran balas y la defensa del Madrid, tan firme hace poco, se llenaba de agujeros. El plan del Brujas era sencillo: aguantar y salir a toda prisa, avasallando a quien estuviera delante.

El Madrid se vio superado, mientras Bonaventure se ponía las botas. En el primer gol, todos los jugadores del Brujas llegaron antes que los del Real Madrid; en el segundo, Modric perdió un balón absurdo en una zona donde no se permite eso y condenó a su equipo a la heroicidad y a la afición blanca a preguntarse qué sucede si Modric, Lukita, deja de ser fiable...Courtois hizo una buena parada en una ataque rival, pero necesita actuaciones más convincentes para que el Bernabéu se haga incondicional suyo. Ahora no se fía en exceso del belga, que como Nacho, tampoco salió en la segunda parte. Tenía el portero problemas estomacales y mareos. Una de las primeras cosas que hizo Areola fue detener una peligrosísima contra.Como no podía ser de otra manera, la segunda parte fue otra historia, mucho más acorde con lo esperado.

El Real Madrid dominando la situación y rodeando al rival, mientras el Brujas se limitaba a resistir. Ya no era el equipo feliz de antes del descanso. Ahora estaba agobiado, haciendo faltas y viendo tarjetas. Marcelo estaba en la izquierda, sin tiempo para tomarse un tiempo. Recién salido de la lesión tenía que ayudar a levantar el equipo y se puso a ello, con Carvajal dejándose la vida en el otro lado y el equipo ya definitivamente más mentalizado. Lucas Vázquez seguía intentándolo por la derecha ante la incomprensión de parte de la grada que le ha elegido como el culpable de todos los males. Está en un momento en el que sólo se destacan sus errores y ninguno de sus aciertos. Aunque puede que los primeros sean más que los segundos.No se le puede reprochar al Real Madrid que no lo intentase. Se puso a ello en un comienzo volcánico en la segunda mitad que llegó a buen puerto con el remate de Sergio Ramos de cabeza tras un sutil pase de Benzema, un delantero al que le encanta salirse del área. Tiene un problema el Madrid con eso: porque ya sabe que a Karim le gusta jugar con el resto, tocar el balón, pero nadie ocupa el área entonces. Fueron Sergio Ramos y Casemiro quienes marcaron y Varane quien tuvo otro remate.Porque el Madrid volvió a lo que más naturalmente le sale en situaciones de emergencia: balones al área. Casemiro cazó una falta cuando el partido enfilaba la última recta y empató el choque. El Bernabéu entonces creyó que en esos cinco minutos todo era posible. Saltó una vez Ramos y no llegó al balón el portero, pero la jugada acabó en nada. Estuvo ahí el partido.

Era ya todo un desorden: Vinicius en la izquierda, Hazard buscando su sitio, que no termina de encontrar, Ramos de delantero. Pero no hubo manera. La primera mitad pesaba demasiado.