«Invasión»

España dirige la Premier

Hay más entrenadores españoles que ingleses en su Liga. Con la llegada de Javi Gracia al banquillo del Leeds ya son seis por sólo cuatro técnicos nativos

Javi Gracia, nuevo entrenador del Valencia
Javi Gracia, nuevo entrenador del Leedslarazon

Cuando Rafa Benítez llegó al Liverpool en 2004 no sabía que estaba abriendo el camino para que los entrenadores españoles colonizaran la Premier. Los «reds» llevaban 20 años sin ganar la Copa de Europa y él lo consiguió a la primera con aquel milagro de Estambul, donde el Liverpool igualó los tres goles que el Milan había marcado en la primera parte antes de derrotarlo en los penaltis. Después ganó una Copa y una Community Shield, la Supercopa inglesa. Pero lo mejor ya estaba hecho.

Han pasado casi 20 años y ahora los entrenadores españoles son mayoría en la Premier. Con la llegada de Javi Gracia al Leeds ya son seis los que dirigen a equipos de la máxima categoría inglesa. Hay más entrenadores españoles que ingleses en la Premier y el conjunto de los británicos sólo supera por uno a los españoles.

El número ha crecido con el paso de las jornadas. Al comienzo de la temporada sólo eran dos los técnicos españoles que dirigían en la primera división del fútbol inglés: Pep Guardiola y Mikel Arteta. Son, curiosamente, los entrenadores de los dos equipos que se están jugando el título. Con la temporada avanzada se les han unido Emery en el Aston Villa; Lopetegui, en el Wolverhampton; Rubén Sellés, en el Southampton; y Javi Gracia, el último en llegar para entrenar al Leeds, donde también dirigió un partido como interino Paco Gallardo.

Guardiola es el ejemplo que ha reforzado la confianza en los preparadores españoles que comenzó con Benítez y que continuó con Roberto Martínez, aunque el caso del nuevo seleccionador portugués es diferente, porque la mayoría de su carrera como jugador transcurrió en Inglaterra y allí comenzó su trabajo como técnico.

Pep no ha ganado la Copa de Europa, como hizo Benítez, pero ha conseguido 11 títulos en Inglaterra desde que llegó en 2016 al banquillo del City. Ha ganado cuatro Ligas, una Copa, cuatro Copas de la Liga y una Community Shield.

«No hay mejor sitio para jugar y entrenar que en Inglaterra. No lo puedo comparar ni con España ni con Alemania. Sobre todo por cómo te defiende la gente aunque no ganes. No te silban, están contigo», reconocía Guardiola en una entrevista con la televisión del City en 2019.

«Recuerdo lo difícil que fue la primera temporada, caímos ante el Mónaco en la Liga de Campeones y no nos fue bien en la Premier, pero la gente nos apoyó y en el estadio nos animaban. Además, no hay prensa entre semana. Es el lugar perfecto para trabajar. No gané un título en mi primera temporada y no olvido que la gente me apoyó. En otros lugares, los aficionados te abuchean si no ganas, pero aquí siempre te apoyan», añadía el preparador español.

A su lado aprendió Arteta. Primero como futbolista y después, como entrenador. El actual entrenador del Arsenal era canterano del Barcelona cuando Pep se encargaba de dirigir el centro del campo azulgrana. Guardiola era su referencia, pero no dejaba hueco para nadie más y Arteta tuvo que salir. Después se reencontraron en el banquillo del City. «Cuando veo la influencia de Pep en el fútbol en los últimos 20 años es increíble porque sabes que lo ha cambiado todo», reconoce Mikel.

Su buen trabajo y el de otros técnicos anteriores ha hecho que los clubes ingleses se animen a seguir contratando a españoles. Y, en algunos casos, no les importa lo que puedan costar. El Aston Villa pagó sin dudar los seis millones de euros de la cláusula de rescisión de Unai Emery para sacarlo del Villarreal en mitad de la temporada. Sin esperar ni siquiera al parón que llegaba en noviembre por el Mundial. El sueldo del técnico vasco es de siete millones de euros anuales, muy lejos de lo que podría ofrecerle casi cualquier equipo de la Liga española.

El potencial económico de la Premier y el buen nivel de los entrenadores españoles hace lógico que se junten. El trabajo de formación en España ha sido imitado desde principios de siglo primero por Alemania y más tarde, por Inglaterra. Sus técnicos y el entonces presidente de la Federación acudieron a Las Rozas en varias ocasiones para reunirse con Ginés Meléndez cuando era coordinador de las selecciones inferiores españolas y con el presidente de entonces, Ángel María Villar. Los métodos que llevaron a España a dominar el fútbol juvenil fueron la base en la que se apoyaron los ingleses para construir una cantera ganadora.

Desde que comenzó el siglo los ingleses han ganado el Mundial sub’17 y sub’20 en 2017, el Europeo sub’19 en el mismo año y en 2022 y el Europeo sub’17 en 2010 y en 2014. Y con la selección absoluta fueron finalistas de la Eurocopa 2020 y cuartofinalistas en el pasado Mundial de Qatar.

Inglaterra ha conseguido el nivel futbolístico que envidiaba en España, pero sus entrenadores no han llegado a la misma altura. Por eso recurren a los españoles.

Después de Emery llegó Lopetegui para estrenarse en Navidades como entrenador del Wolverhampton. El fichaje del exseleccionador español era un anhelo antiguo del equipo inglés, al que ya estuvo a punto de dirigir antes de hacerse cargo de la Roja.

En las últimas semanas Rubén Sellés y Javi Gracia se han unido a la lista de técnicos españoles en la Premier. Sellés dirige al Southampton, en el que comenzó la temporada como segundo entrenador, luego se hizo cargo del equipo como entrenador interino y de manera casi inmediata fue nombrado técnico del primer equipo. Ha desarrollado casi toda su carrera fuera de España, en países como Rusia, Dinamarca, Grecia, Azerbaiyán o Noruega antes de llegar a Inglaterra.

Javi Gracia ya había dirigido en Inglaterra al Watford y el Leeds pensó en él después de que le resultara imposible contratar a otro entrenador español, Andoni Iraola. El último en llegar para colonizar la Premier desde los banquillos.

Xabi Alonso, el único en Alemania

La Premier League no sólo disfruta de técnicos españoles, también la dirección deportiva del Leeds la ocupa un español, Víctor Orta, y cuenta además en su equipo de ojeadores con Gaby Ruiz. Dos antiguos comentaristas en medios que ahora se ocupan de la dirección deportiva del equipo que ha fichado a Javi Gracia para el banquillo. En otros países de primer nivel no está tan extendida la presencia de entrenadores españoles. El caso más llamativo es el de Pablo Longoria, que fue ojeador del Newcastle primero y luego trabajó en Italia con el Atalanta, el Sassuolo y la Juventus. Ahora es el presidente del Olympique de Marsella, donde también ejerció como director técnico Andoni Zubizarreta.

Fuera de la Premier, el entrenador más destacado es Xabi Alonso, que se hizo cargo del Bayer Leverkusen en sustitución de Gerardo Seoane, un suizo de origen español. Xabi es solo el segundo técnico español que dirige en la Bundesliga. El primero fue Pep Guardiola, que lo dirigió en su última etapa como futbolista en el Bayern de Múnich. El Leverkusen, al que cogió en descenso, está en la mitad de la tabla.