MVP

¿Y si el mejor del torneo es el portero?

En el adiós de Messi y Cristiano, o la confirmación de Mbappé, los más decisivos están siendo guardametas como Bono, «Dibu» Martínez y Livakovic. Sólo un portero ha ganado el MVP de los Mundiales

Bono para un penalti a España en los octavos de final del Mundial
Bono para un penalti a España en los octavos de final del MundialPetr David JosekAgencia AP

Thibaut Courtois se quejó amargamente en la pasada gala del Balón de Oro: «Ganas LaLiga y la Champions, tu equipo gana gracias a tus paradas... Y solo quedas séptimo», aseguró. «Está claro que este año era para Karim [Benzema], pero yo lo veo imposible; para un portero es imposible ganar este premio. No sé si como portero se puede hacer más de lo que hice yo el año pasado», insistió, y pasó a describir cómo había evolucionado el trabajo que tiene que hacer en el campo: «Yo creo que cada año un portero es más importante en el equipo. Hay que jugar desde atrás, hay que hacer las paradas, hay que actuar como líbero detrás de la línea. Ojalá un año lleguemos y sigamos peleando para conseguir el premio». El guardameta belga no ha tenido un Mundial demasiado feliz en Qatar, pero varios de sus colegas están continuando con la reivindicación que hizo el «1» del Real Madrid.

Quedan cuatro equipos vivos en el torneo y en tres de ellos el gran protagonista está siendo el único que puede tocar la pelota con las manos. Si el gol es la fiesta del fútbol, los porteros podría considerarse que son los aguafiestas porque son los que tratan de evitarlos, pero en el emirato están brillando como nunca. Croacia tiene a Modric, la leyenda, el eterno, el incansable, pero el gran héroe está siendo Livakovic, que ha tomado el relevo de Subasic. Este último, en el Mundial de 2018, fue protagonista en la tanda de penaltis de octavos contra Dinamarca y en la de cuartos contra Rusia. Ahora, en Qatar, el guardameta del Dinamo de Zagrebhundió a Japón desde los once metros y también a Brasil, tanto en la tanda como durante el partido, despejando todo lo posible y sucumbiendo solo al golazo de Neymar, que iba para histórico porque igualaba a Pelé como máximo anotador de la canarinha, pero se quedó en nada. En Argentina todos miran a Messi, pero Messi tuvo que mirar a su portero, Emiliano «Dibu» Martínez, en los cuartos ante Países Bajos: «Sabemos que en estos momentos no falla», dijo el capitán después de que Argentinaderrotara a los «Oranje» también desde la tanda de penaltis, donde el cancerbero bonaerense empezó deteniendo los dos primeros tiros, lo que facilitó la labor de sus compañeros.

Bono, MVP

Como hay tanta igualdad y tanto miedo por la presión que supone un Mundial, dos de los semifinalistas se han decidido en la suerte de los penaltis. En otro de ellos, Marruecos, su futbolista más decisivo también es el que lleva guantes. Bono hundió a España en los penaltis en octavos y con Portugal el conjunto africano no llegó a los 120 minutos gracias al guardameta, que estuvo especialmente inspirado en una segunda parte de acoso luso, con el tiro de Joao Félix como oportunidad más importante y la respuesta en forma de vuelo de Bono. «Yo siempre digo que el portero tiene que hacer su trabajo, a veces sale por un lado, a veces por el otro», afirma el cancerbero del Sevilla con naturalidad. Marruecos tiene la calidad de Ziyech o el trabajo de Amrabat, pero el MVP tanto contra el equipo de Luis Enrique como contra Cristiano Ronaldo fue Bono.

El otro semifinalista es la gran Francia, que en cuartos ante Inglaterra tampoco contó con el mejor Mbappé. El máximo goleador del Mundial, brillante en octavos, estuvo gris el último día. Las caras del triunfo fueron Griezmann y Giroud. Lloris no tuvo que hacer ninguna parada extraordinaria, pero sí ganó la guerra psicológica a su compañero en el Tottenham, Harry Kane, que le marcó el primer penalti, pero no el segundo, el que hubiera llegado el encuentro a la prórroga.

En Qatar se está hablando más de paradones que de golazos, a la espera de las dos últimas rondas. Courtois se quejaba en el Balón de Oro, galardón que solo ha conseguido un portero en toda la historia, el mítico Yashin en 1963. Pero si se mira el premio al mejor jugador de los Mundiales, que se entrega desde España1982, se observa algo parecido: únicamente Oliver Kahn lo consiguió, curiosamente en 2002, cuando Alemania fue derrotada en la final por la Brasil de Ronaldo y Rivaldo. Poco rastro más hay de porteros en el podio: Harald Schumacher, Balón de Plata en México 1986. Qatar es el lugar donde Cristiano Ronaldo y Messi, los grandes referentes de los últimos tiempos, se van a despedir de un Mundial; también donde piden paso jóvenes como Bellingham, Gavi o Musiala, que han mostrado que el futuro es esperanzador; o donde Mbappé tenía que reivindicarse; pero también donde los porteros están siendo tan decisivos como siempre, pero de forma más evidente.