El increíble punto con el que el español forzó el tie-break ante Tiafoe en el primer set

Alcaraz es un coleccionista de “highlights” y si algo gusta al ruidoso público de la Arthur Ashe y al aficionado estadounidense en general son los puntos espectaculares. Y de esos no hay partido de Carlitos en el que protagonice varios. La semifinal ante Frances Tiafoe no iba a ser una excepción. El partido se estaba desarrollando con relativa tranquilidad en el primer set. Ambos jugadores defendían su servicio con autoridad, especialmente el español, pero en el duodécimo juego llegó el primer momento cumbre de la “semi”.

El servicio correspondía al murciano. Se encontró con un amenazante 30-30 que fue a más. Tiafoe dispuso de su primera bola de break que coincidía con la oportunidad para cerrar la primera manga. Un par de buenos servicios permitieron a Alcaraz escapar de la situación comprometida, pero lo mejor estaba por llegar. Se trataba de alcanzar como fuera el desempate y Carlitos lo hizo una vez más a lo grande.

Fue uno de esos puntos imposibles en los que el rival de turno parece que lo tiene ganado, pero... Alcaraz sirvió y Tiafoe dejó un resto a mitad de pista que llevó al español a aproximarse a la red. Lo hizo y decidió hacer un dejada. El estadounidense reaccionó de inmediato y mandó la bola a la línea. Se quedó en la red porque Alcaraz devolvió la pelota en una de sus estiradas imposibles. Tiafoe voleó, Carlos volvió a llegar y mandó un revés liftado cruzado. Hubo una nueva volea del yanqui un poco más profunda que la anterior. Entonces fue cuando Alcaraz protagonizó uno de esos golpes que nadie más es capaz de realizar en el circuito.

El español retrocedió a toda velocidad, se dejó deslizar cerca de la línea, se giró y conectó un passing con la derecha que lo más lógico es que se hubiera quedado en la red o se hubiera ido largo. Nada de eso. Con Tiafoe en la red, le superó con una limpieza increíble. Y el público, Michelle Obama incluida, se puso en pie y dedicó una estruendosa ovación al español. A Tiafoe no le quedó otra que sonreír. Había que seguir jugando y el espectacular punto desembocaba en el tie-break. Al estadounidense no le hizo especial daño porque en el desempate se mostró superior. Se apuntó el primer set de la semifinal, pero Alcaraz seguía con ganas de pelea.