Entrevista

Teresa Portela: "Las mujeres ahora ven que ser madre no es renunciar a tu carrera como deportista"

Los de París serán sus séptimos Juegos Olímpicos. Fue pionera en conciliar maternidad y deporte. Nació Naira... Y después Teresa siguió ganando subida a su piragua

Teresa Portela disputará en París sus séptimos Juegos Olímpicos
Teresa Portela disputará en París sus séptimos Juegos OlímpicosRFEP

Teresa Portela (Cangas de Morrazo, 41 años) es historia del deporte español. No le importa gritar en alto su edad a la mujer que ha disputado seis Juegos (desde Sídney 2000) y que en París estará en los séptimos, con un cambio: antes competía sola en la piragua y ahora lo hará acompañada, en el K4 500. La única medalla que le faltaba era la olímpica, y en Tokio 2020 fue plata, tras los diplomas de Atenas, Pekín, Londres y Río. Atiende a LA RAZÓN después de ser reconocida en los IV Premios Admiral al Deporte Español por su trayectoria deportiva. Son 24 años en la élite.

¿Cómo se le gana al tiempo?

Me planteo objetivos muy a cortito plazo, me estaban preguntando ahora por el año 2028, los Juegos de Los Ángeles [serían sus octavos Juegos e igualaría al marchador Chuso García Bragado], no tiene sentido que nos planteemos qué va a ser de nosotros dentro de cuatro años, porque al final probablemente nos frustremos. Nadie puede asegurar dónde va a estar de aquí a cuatro años, y menos siendo un deportista de élite, que tienes que estar al cien por cien cada día. Yo me marcó objetivos temporada a temporada, ésta mi cabeza está en los Juegos de París y pasito a pasito. Son premios como este de Admiral los que me hacen mirar hacia atrás, que mis primeros Juegos fueron hace 24 años. Si no, yo estoy enfocada en el día a día a día y en el objetivo que tengo puesto.

Son seis Juegos, los séptimos a la vuelta de la esquina. ¿Es eso ya una medalla?

Totalmente, para mí es una medalla, no física, pero lo siento como un auténtico logro, estar 24 años en la élite, poder estar entre las mejores del mundo, finales de Mundiales, finales olímpicas, he podido estar en seis Juegos...

"El éxito también es proponerte algo y luchar por ello, luego puede salir o no"

Y en los sextos logró la plata que tanto buscaba [en Mundiales tiene 17, con dos oros; y en Europeo 18, siete de oro]. ¿Qué supuso?

En Tokio me sentía ganadora de poder estar compitiendo en lo que eran mis sextos Juegos. Esa medalla evidentemente la quería, entrené cada día para intentar conseguirla, una vez que tienes tantas horas de entrenamiento y estas todos los días trabajando para eso, evidentemente la quiero, porque detrás hubo mucho, mucho, mucho trabajo, y lo que acredita eso a veces es la medalla, aunque puedes quedar quinta y has trabajado lo mismo. La quería porque sentía que la había peleado mucho y que tenía que ser mía, pero si no lo hubiese sido me hubiese sentido igual de feliz sobre todo por haberlo intentado y por no haber desistido. El éxito también está cuando vas a por algo y lo luchas, luego lo puedes conseguir o no, pero yo orgullosa de haberlo peleado.

En todos estos años, ¿cuál ha sido la mayor piedra en el camino?

Siempre hay obstáculo, gente que pueda ser más afín o no, pero yo en general veo lo positivo siempre, me siento afortunada, agradecida. La vida al final no es una línea recta, siempre hay cosas que hay que intentar salvar, en este caso por ejemplo a nivel deportivo yo llevaba muchos años formándome en el K1 200 y ahora no es olímpica, hay que reinventarse y otra vez partir de cero, un K4 500 y vamos a empezar de cero, aun a sabiendas de que es algo que podía no funcionar. Finalmente funcionó, y muy bien [bronce en el Mundial del año pasado], pero es un riesgo.

Teresa Portela, Sara Ouzande, Carolina García y Estefanía Fernández, bronce en K4 500 en el Mundial de 2023
Teresa Portela, Sara Ouzande, Carolina García y Estefanía Fernández, bronce en K4 500 en el Mundial de 2023RFEP

¿Es muy diferente competir sola que con otras tres compañeras?

Realmente sentía que tenía un equipo detrás, lo único que a la hora de competir, para lo bueno y para lo malo, iba yo sola. Ahora también es un reto poder gestionar con mis compañeras los momentos de tensión, conocernos; es diferente, pero también bonito.

¿Cómo ha cambiado la Teresa de Sídney 2000 a la de ahora?

Todo, al final son muchos años y vas buscando pequeñas mejoras, todo importa, todo es necesario, soy una persona que me cuidé, que descansé, fui muy disciplinada. Ahora estoy más fuerte, claro, que con 18 años, tengo más confianza, más seguridad, al final todo lo que he vivido hasta ahora son aprendizajes y sabes manejarte más en según qué circunstancias.

Fue de las primeras en ser madre y deportista, en 2013.

Tenía claro que quería ser madre y no quería renunciar a ello. Llegó un momento en el que por edad no lo quería posponer más y fue otro reto más, no saber cómo iba a gestionar los dos aspectos, y una vez más contenta de no haber renunciado y de haberme dado la oportunidad de ver si podía conciliar y poder con las dos cosas.

"En mi época lo que veía era que si querías ser madre tenías que renunciar a tu carrera deportiva. Ha habido una evolución y eso ha cambiado"

¿Tuvo algún problema, por ejemplo, con los patrocinadores, como ha pasado en otros deportes?

No había mucho patrocinador, así que no había problemas, pero fue algo positivo en el deporte, el hecho de que ahora la mujer vea... En mi caso lo que veía era que toda mujer que quería ser madre dejaba el deporte, ahora las niñas ven que no hace falta renunciar si una quiere continuar, que se puede dar la oportunidad de intentarlo, que el único camino no es renunciar. Es bonito ver esa evolución, ver también cómo las carreras deportivas se hacen más longevas y que muchas mujeres no renuncian.

¿Cambia mucho en función de la edad de la niña?

Es difícil, cuando tienes un bebé yo lo que quería era estar con ella, se me hacía muy duro tener que ir a entrenar e irme a trabajar, pero tenía que ser así. Ahora que va a hacer diez años, me sigue doliendo no estar con ella...

Pero la acompaña mucho.

Siempre me acompaña a todas las competiciones.

Y también sabe ya quién es su madre...

Sí, al principio una es bebé y no se entera, sólo es “mamá y me haces falta”, ahora es más consciente de lo que he conseguido, y a mí también me emociona ver momentos de ella de orgullo.