José Manuel Martín

El VAR ratifica el triunfo de Dovizioso

La victoria del italiano en la última curva ante Márquez estuvo en el alero. Se reclamó una irregularidad en dos piezas de la Ducati.

Andrea Dovizioso celebra su triunfo en el Gran Premio de Qatar / Reuters
Andrea Dovizioso celebra su triunfo en el Gran Premio de Qatar / Reuterslarazon

La victoria del italiano en la última curva ante Márquez estuvo en el alero. Se reclamó una irregularidad en dos piezas de la Ducati.

Ganó Dovizioso en la apertura del Mundial 2019 y lo hizo dos veces. En la última curva con otra maniobra genial ante Márquez y unas horas después, en la sala de reuniones de Dirección de Carrera, que denegó una reclamación que habían hecho el resto de fábricas menos Yamaha contra Ducati. El VAR tuvo que intervenir y lo hizo igual que en el fútbol. Tardó bastante tiempo en decidir y durante esos momentos, la celebración del italiano fue contenida, por si el veredicto era en contra y lo que pensaba que eran 25 puntos sumados se convertía en un cero.

La disputa era por una alerón colocado en la parte trasera de la moto, se supone que para redirigir el aire hacia el neumático y refrigerarlo. Algo parecido colocaron también en la zona delantera los de Ducati, que siempre se las ingenian para sacar ventaja bordeando el reglamento. Ya lo habían usado en algunos tests y en los entrenamientos, así que sorprendió la reclamación. No surtió efecto el trabajo en los despachos de Honda, KTM, Suzuki y Aprilia, así que Dovizioso arrancó el año de la misma forma que el curso anterior.

Y es que todo fue exactamente igual que hace 365 días en el circuito de Losail. Dovi ha sido muy sigiloso este invierno y durante el fin de semana. Ha ido poco a poco poniendo todo a punto y llegar a la carrera perfecto, para aprovechar un circuito que va de maravilla a la velocidad punta de su máquina roja. Lideró una carrera más bien en grupo, mientras Márquez calculaba sus opciones y se reservaba para el desenlace. Entraron en la última vuelta pegados, adelantó Marc y se lo devolvió su rival, así que en ese orden afrontaron la última curva. Igual que en 2018, Dovi supo que el español soltaría frenos y entraría con todo. Le abrió la puerta para que se fuese largo y él giró antes y abrió gas hacia la meta. La misma jugada y el mismo resultado: victoria por 23 milésimas, cuando hace un año las que separaron a ambos fueron 27. Un espacio casi imperceptible, que abre un curso espectacular. «He perdido, pero estoy contento. Lo he intentado, porque si no, no me quedo tranquilo del todo. He estado muy cerquita otra vez», aseguraba Marc, consciente de que si sufriendo en un trazado que no le va bien queda tan cerca del triunfo, en otros escenarios la sonrisa será suya con facilidad.

«Nadie más se atrevería a entrar en esa curva como lo hace Marc. Es muy fuerte y siempre lo intenta», reflexionaba Dovizioso, feliz por haber empezado otra vez golpeando primero. Crutchlow fue sorprendentemente tercero, Rins confirmó que lo suyo va en serio y Rossi hizo otro milagro en domingo y tras hacer casi el ridículo el sábado fue la mejor Yamaha en pista. Lorenzo fue el gran derrotado, con un puesto trece y malas sensaciones. Todavía no se siente seguro con la Honda, necesita tiempo y tiene el justo si quiere opositar a todo.