Economía

“El fin de la España vaciada depende de la conexión a internet y conseguirlo es cuestión de voluntad”

Entrevista con Victoria Bazaga, presidenta de Fextur

Victoria Bazaga
Victoria BazagalarazonLa Razón

– Presidenta de la Federación Extremeña de Turismo Rural, miembro del Consejo Económico y Social del Gobierno regional y primera mujer consejera de Caja Rural en su tierra. Todo un perfil pionero y rompedor de techos de cristal.

– Soy empresaria desde los 17 años y aunque soy urbanita, mi pasión por el mundo rural me llevó a convertirme en «neorural». Hace 18 años compré un cortijo del siglo XIX en una Extremadura que reconoce que debe salir de la agricultura para abrirse a nuevas facetas. Y siempre he tenido vocación social, así que formo parte de organismos como el Comité Ejecutivo de Acción Local o el Consejo de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Cáceres.

– Usted, que es experta en el mundo rural, y ahora que se habla tanto de la despoblación. ¿Qué solución ve a la España vaciada?

– No debemos preocuparnos tanto de contar cuántos somos, sino de saber quiénes somos y qué nos falta. Va a haber un trasvase de población hacia el campo en el que la mujer será clave porque arrastra a la familia y busca su bienestar. El desarrollo rural depende en realidad de algo tan básico como la conexión a internet, que es la llave para acceder a la sanidad mediante videoconsultas, a la formación y al trabajo, estés donde estés. Y es una cuestión de voluntad, porque no me puedo creer que puedas tener conexión a internet desde Alaska y no desde Teruel o Badajoz. Con eso y con una nueva legislación que ayude al desarrollo económico rural, España no estará ni vaciada ni vacía. La movilidad es la tercera pata, trenes más rápidos a las ciudades y nuevos medios de transporte que permitan la interrelación entre zonas de interior.

– Es, entonces, una cuestión eminentemente tecnológica. Su solución puede llevar a que sean las ciudades las que se queden vacías.

– Vivir en el campo es calidad de vida. España debe ver la oportunidad que ofrece el mundo rural, tanto para residencia permanente como temporal o turística. Ya no viviremos siempre en el mismo sitio y muchos vendrán a nuestras zonas: niños, mayores y profesionales que ya hayan cumplido una etapa. Habrá años en que querremos estar a tope en el ritmo urbano, pero ya, hoy, yo sólo tardo dos horas mas que tú en llegar a París y a cambio veo amaneceres espectaculares y como tomates recién cogidos de la huerta.

– ¿Qué es lo más urgente que debe hacer el Gobierno?

– Que los recursos económicos nos lleguen también. Y gastar dinero en marketing para que la gente sepa lo bien que se vive en el campo. En los próximos cinco años se van a tomar muchas decisiones. La mujer ejecutiva, especialmente, tiene un tope para aguantar el ritmo de las ciudades; nos estamos cansando de que salga el sol cada mañana y ver que la vida se nos va, se nos va... esos perfiles de mujeres formadas, profesionales y con grandes capacidades pueden hacer de todo en las zonas rurales y aportar mucho valor. Tengo en mi agenda traeros a las que tenéis más de 45 años a este mundo por surgir, sin directrices previas, en el que lo vamos a crear todo nosotras. Hay que cambiar la imagen del mundo rural, que tiene un concepto diferente de la rentabilidad, porque no todo es dinero, y vivir como nosotros vivimos no tiene precio. Queda mucho margen de crecimiento en la España del interior.

– ¿Qué tal ha estado Fitur este año?

– Vendemos experiencias de ocio, relax, deportivas, incluso de trabajo, y cada año es un reto superarse. Es la feria mas difícil pero también la más interesante.