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Transporte ferroviario

Los competidores de Renfe en el AVE podrán ofrecer menos servicios sin penalización por el coronavirus

Competencia les libera de tener que pagar recargos por el impacto que el Covid-19 puede tener en sus planes iniciales de negocio

Imagen de un convoy de Trenitalia, que se ha aliado con Ilsa (Air Nostrum) para competir por la alta velocidad en España
Imagen de un convoy de Trenitalia, que se ha aliado con Ilsa (Air Nostrum) para competir por la alta velocidad en EspañalarazonLa Razón

El 13 de diciembre es el día en el que el servicio de alta velocidad ferroviaria español quedará abierto a la competencia. En esa fecha, junto a los trenes de Renfe comenzarán a circular los de la francesa SNCF (a través de su marca comercial Railsfera) en los corredores ferroviarios de Madrid-Barcelona, Madrid-Levante y Madrid-Sur. Los del otro competidor, Ilsa (Air Nostrum)-Trenitalia, no rodarán hasta enero de 2022. Para que ambas compañías puedan operar, han firmado sendos acuerdos marco con el gestor de las infraestructuras ferroviarias (Adif) a los que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNCM) ha dado ahora el visto bueno. Los contratos recogen una oferta de servicios que, muy probablemente, ambas compañías no puedan cumplir por la incidencia del coronavirus en la economía española.

La alianza entre la aerolínea y la operadora italiana ofrecerá, según los planes iniciales, 16 frecuencias diarias en el corredor del AVE a Barcelona, el AVE a Valencia y el que une Madrid y Sevilla, mientras que SNCF ofrecerá cinco. El incumplimiento de esta oferta, en cualquier caso, no les va a acarrear ningún tipo de penalización a ninguno de los dos operadores dado que el motivo de ello, el Covid-19, es ajeno a su voluntad. Y, como explica Competencia, la Comisión Europea avala posibles cambios en la capacidad marco que les otorgó Adif a ambas compañías sin coste alguno al tratarse de una circunstancia sobrevenida en la que no han tenido nada que ver.

El visto bueno de Competencia constituye el último paso necesario para que Adif y los operadores firmen sus contratos marco, algo que, previsiblemente, ocurrirá el próximo lunes, 13 de abril. A partir de ese momento, ambas compañías quedarán habilitadas para competir con Renfe a partir de diciembre.

SNCF e Ilsa-Trenitalia

En sus resoluciones, el regulador no obstante vincula el contrato de Renfe a que su periodo de vigencia se limite a cinco años y no a diez, como ocurre con el resto de operadores con el fin de que puedan desarrollar sus planes de negocio. En el caso del operador público español, la CNMC pide acotar el acuerdo a cinco años o “justificar adecuadamente” la necesidad de que sea de diez años. Según asegura, Renfe “no ha acreditado que requiera incorporar 49 nuevos trenes a su flota actual para los servicios que propone, y que suponen tan solo un ligero incremento de capacidad respecto a los servicios actuales”.

Repecho a los contratos de Adif con SNCF y Air Nostrum-Trenitalia, el regulador considera “acreditadas las inversiones y riesgos que afrontan, y la extensión hasta diez años renovables la vigencia del acuerdo”. Estos candidatos incorporarán 23 y 14 trenes, respectivamente, destinados íntegramente a los tres AVE que se abren a la competencia y, además, deberán desarrollar una red comercial y operativa, y una imagen de marca en el mercado español. No obstante, el organismo llama la atención sobre “aspectos que suponen una cierta incertidumbre en sus planes de negocio”. En concreto, "la disponibilidad de los trenes en las fechas comprometidas, de los sistemas de señalización para circular por el eje Sur (Madrid-Sevilla/Málaga), y la aprobación de las líneas de crédito necesarias para afrontar las inversiones comprometidas.