Europa

Entrevista

Esteban González Pons: “Los fondos europeos no pueden repartirse en el despacho del presidente del Gobierno”

El vicepresidente del PPE advierte de que el reparto del fondo de recuperación de la UE “no va a ser transparente y no va a respetar las competencias de las Comunidades Autónomas”

El eurodiputado del PP Esteban González Pons
El eurodiputado del PP Esteban González PonsManuel Olmedo

En una entrevista con LA RAZÓN, el eurodiputado popular Esteban González Pons insta a tener un “plan B” por si se retrasa el desembolso del Fondo de Recuperación post covid de la UE por el veto de Hungría y Polonia. El vicepresidente del PPE se pregunta cómo “puede el Gobierno aprobar un proyecto de Presupuestos que incluye 30.000 millones de euros de un fondo que no está aún aprobado”.

¿Cómo valora el bloqueo de Polonia y Hungría a los presupuestos europeos y al fondo de recuperación?

Estaba en el guión desde hace tiempo. Lo sorprendente es que el Gobierno español no se lo esperase. Me llama la atención que Pedro Sánchez esté vendiendo desde hace semanas el fondo europeo como un hecho sabiendo el camino que le queda por resolver. No ha sido para nada una sorpresa.

¿Es inevitable que se retrase la recepción de fondos?

Tengo la esperanza de que los jefes de Estado y de Gobierno logren convencer a los Gobiernos húngaro, polaco y esloveno de que con esta actitud obstruccionista a los primeros que perjudican son a sus ciudadanos.

Pero hasta abril los Gobiernos tienen de plazo para presentar sus planes nacionales...

Sí, pero el fondo no está aprobado. Al paquete le queda pasar por el Consejo, donde debe aprobarse por unanimidad, y luego ser aprobado por todos los Parlamentos de la Unión Europea y, en algunos países por sus Parlamentos regionales. En total, 41 Parlamentos deben dar su visto bueno. Bastaría con uno de estos Parlamentos lo rechazara para que se bloquease el fondo. El siguiente escenario negativo que no debe descartarse es que los Gobiernos húngaro, polaco y esloveno den su visto bueno en el Consejo, pero luego el Parlamento de uno de estos tres países vuelva a bloquear el fondo. A mí me parece imprudente la seguridad con la que el Gobierno de España está anticipando lo que el fondo será. Yo creo que sí será, pero todavía le queda mucha negociación.

¿Por que la ejecución de fondos europeos en España del marco presupuestario vigente no llega al 40%?

Hay una pregunta anterior bastante importante. Imaginemos que el fondo queda bloqueado este año. ¿Puede el Gobierno aprobar un proyecto de Presupuestos que incluye 30.000 millones de euros de un fondo que aún no está aprobado? Esta pregunta hoy no tiene respuesta y todos deberíamos estar ya en el “plan B”. En cuanto a la ejecución de los fondos, me preocupan dos cosas. Primero, que el reparto del fondo, tal y como lo ha diseñado el Gobierno, no va a ser transparente, y que no va a respetar las competencias de las Comunidades Autónomas. En el Parlamento Europeo, vamos a intentar imponer a los Gobiernos y, en particular al de España, transparencia. Los fondos no pueden repartirse en el despacho del presidente Gobierno.

¿Y en el caso de los fondos anteriores?

La escasa ejecución de fondos europeos que arrastra España es consecuencia de la distancia psicológica que nos distancia de Bruselas. El conjunto de los empresarios sigue pensando que las decisiones económicas se toman en Madrid, cuando el 70% de las decisiones desde hace mucho tiempo se toman en Bruselas. Por tanto, los empresarios españoles acuden a por ayudas y programas a Madrid, cuando deberían acudir a Bruselas. Para ser sincero, solo tres grandes empresas españolas tienen una representación permanente en Bruselas, así como las cámaras de comercio. Nadie más. Si los españoles entendiéramos que el Bruselas de hoy es el Madrid de antes a efectos administrativos, podríamos alcanzar niveles más altos de ejecución de fondos.

¿Y la burocracia española también influye?

Hay que distinguir entre los fondos habituales y el fondo de recuperación. Para los habituales, las empresas españolas se enfrentan también a la burocracia de Bruselas, que también existe, y a una segunda barrera que es la del idioma. Los españoles con mucha dificultad hablan inglés. Ahora, con la nueva Ley Celaá, algunos incluso castellano. Los nuevos fondos del plan de recuperación, en cambio, van a ser repartidos por la Administración española y el Gobierno de Sánchez tiene la intención de convertirlo en una especie de Plan E como el que hizo Zapatero y tendrá enormes problemas de burocracia.

El nuevo plan apuesta por la Europa verde y la digitalización. ¿España está preparada para aprovecharlo?

El que se trate de un fondo finalista hace que los españoles no podamos gastarnos el dinero en construir nuevos aeropuertos. Esto es una dificultad añadida, pero debería suponer un incentivo para que hiciéramos la transformación económica que nosotros necesitamos. Que Europa nos esté marcando el camino de la economía del futuro debería ser un reactivo para la economía y las empresas españolas. Sin duda, que las ayudas sean finalistas hace que no sea un fondo de reconstrucción, sino más bien un fondo de reinvención. Las empresas españolas son muy imaginativas, por lo que tengo la esperanza de que seamos capaces de utilizarlos completamente.